‘Rent a car’. El sector respira tras meses de incertidumbre - Archivo

TW
0

Los empresarios de la Isla valoran muy positivamente el anuncio del Govern de no aplicar finalmente los impuestos medioambientales sobre los envases, los 'rent a car' y las grandes superficies. Eso sí, aseguran que el mero hecho de haber anunciado sus intenciones de implantar estos tributos ya ha causado un daño que, en algunos casos, será difícil de remediar.

Desde las patronales PIME y CAEB coinciden en lo positivo de la rectificación por parte del Govern en cuanto a sus intenciones de aplicar los impuestos medioambientales. Desde PIME, María García manifestaba ayer su "valoración más que positiva, porque desde las diferentes asociaciones de comercio, restauración y del sector del coche de alquiler habíamos pedido la retirada de estos impuestos. Es una buena decisión la que ha tomado el Govern, porque era una amenaza de incremento de la presión fiscal" que afectaba de un modo muy importante a las empresas.

En términos parecidos se expresó el gerente de CAEB en Menorca, Josep Fortuny. "Desde que el Govern anunció que pensaban incorporar estos impuestos, CAEB se mostró siempre contrario, y promovimos infinidad de reuniones con los sectores afectados y el Govern, defendiendo una postura común, porque cualquier incremento impositivo pondría en dificultades a las empresas".

Tanto Fortuny como García se expresaron en los mismos términos al referirse al daño hecho. "Solo el hecho de anunciar los impuestos ya perjudicó tanto a las empresas como a las otras administraciones", afirman.

Y es que el caso del impuesto que iba a afectar a las empresas de alquiler de coches ha supuesto una gran pérdida económica.
Coches "fugados"

El consistorio de Menorca que más ha salido perdiendo con el anuncio de la implantación de los llamados impuestos verdes ha sido el de Es Mercadal, que este año ha dejado de ingresar unos 75.000 euros por la fuga de vehículos de alquiler hacia ayuntamientos de la Península, como Venturada, Valdemorillo o Valdilecha, en Madrid, donde estos coches han empezado a tributar.

Sobre esta cuestión, el presidente de la Asociación Balear de Alquiler de Vehículos con y sin Conductor (BALEVAL), Antoni Masferrer, considera que la fuga de vehículos "fue un movimiento enérgico por parte de las empresas, y dar marcha atrás va a costar. Tardamos treinta años en decidirnos en pagar los impuestos de circulación fuera de Menorca, y cuando pierdes un cliente, es difícil recuperarlo", indicó. Y es que en la Península las empresas han hallado un modo de reducir los tributos que afectan al sector. "Si una empresa ha matriculado mil coches, y con cada uno se ahorra 30 euros, será difícil que vuelvan a Menorca", reconoció el empresario, quien tilda los impuestos verdes como "algo ilógico, una cosa mal hecha y que nos parecía una barbaridad".

Mientras, desde la Asociación Empresarial Menorquina de Alquiler sin Conductor (ASC), su presidenta, Joana Capó, reitera el daño que, sin llegarlos a aplicar, han llegado a causar los impuestos verdes. "Suponían un coste extra para las empresas, porque nosotros pagamos más que nadie, y uno lo que quiere es salvar su empresa. Esta tasa fue el remate final, por eso los impuestos de circulación se han ido fuera de Menorca. Es un trabajo que ya se ha hecho, y son muchos los que ya no volverán". Porque "desde siempre estuvimos pagando aquí los impuestos, porque somos conscientes que eso reparte riqueza en Menorca". Sin embargo, ahora que las empresas han conseguido reducir el impuesto "de 60 a 6 euros para los coches normales, y de 120 a 70 euros los de alta gama", es fácil prever que los ayuntamientos menorquines lo tendrán complicado para recuperar estos ingresos.

En esta línea, Antoni Masferrer indica que "si antes no nos sentíamos queridos, ahora aún tenemos más motivos para no sentirlo".

Futuro
Joana Capó confiesa que "temía que el problema se alargara otro año, y que volviéramos a encontrarnos con que no podíamos dar los precios con la suficiente antelación". Por eso, el anuncio del presidente el Govern, José Ramón Bauzá, ha sido muy bien recibido por el sector. "A ver si hacemos borrón y cuenta nueva", decía esperanzada. "Parece que la decisión es definitiva, pero no hay nada en esta vida que podamos dar por seguro".
Igualmente, Antoni Masferrer concluyó diciendo que "bien está, lo que bien acaba".