La receta escogida se elaboró con dorada de Menorca | Gemma Andreu

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Poco se podía imaginar Fra Roger, el fraile del convento de Sant Francesc de Ciutadella que en el siglo XVIII escribió el valioso libro de recetas 'Art de la Cuina', que 300 años después cinco estudiantes de cocina de entre 19 y 30 años iban a asumir el reto de elaborar una de sus recetas. Es la original propuesta de la primera edición del concurso Xef Jove Menorca, celebrado ayer en el recinto ferial de Es Mercadal en el marco de los actos del Dia de les Illes Balears.

Juan Carlos de la Cruz, Pau Morales, Sergi Camps, Maite Vilamalla y Daniel Felipe, todos estudiantes de cocina en el IES Maria Àngels Cardona de Ciutadella, llegaron al recinto sin conocer cuál de las 209 recetas recogidas en el histórico libro escrito en menorquín antiguo iban a tener que reinterpretar. La escogida, la número 114, 'Altra panadera ab tomàtigues, prunes i confitura'. Por delante, una hora y cuarto para realizar una propuesta culinaria con los ingredientes originales.

Con la atenta mirada de alrededor de un centenar de curiosos y del jurado, formado por Miquel Mariano, chef del restaurante de Ca n'Aguedet, Josep Pelfort, médico y cocinero experto en el libro Art de la cuina', y Carles Joanico, cocinero profesor del Maria Àngels Cardona; los aprendices de Fra Roger cocinaron sin descanso, intentaron templar los nervios y enfrentarse a una de las grandes dificultades de esta prueba de 'show cooking', mezclar con harmonía el dulce y el salado. El jurado valoraba el sabor, la presentación, la originalidad en la interpretación y la pulcritud, una de los elementos más apreciados por el fraile franciscano.


Concurso

Al más puro estilo de los programas de televisión que han popularizado los concursos de cocina, los participantes emplataron y pasaron uno a uno por la mesa del jurado para pasar el examen. Cada uno de los cuatro criterios se valoraban con un máximo de 25 puntos y, finalmente, el que se hizo con el premio fue Juan Carlos de la Cruz, probablemente el que se mostró más tranquilo y de cuya propuesta el jurado destacó especialmente la interpretación fidedigna de la receta.

El premio, un curso de cocina valorado en 100 euros en el restaurante Sa Parereta d'en Doro, ubicado en Sant Lluís, y la satisfacción de haber resuelto con éxito una de las recetas más antiguas de la receta menorquina de que se tiene constancia.