Cala en Bosc. La playa de Ciutadella ha sido una de las últimas en las que se ha intervenido antes de Semana Santa | Paco Sturla

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Tradicionalmente, la Semana Santa se considera el pistoletazo de salida para la temporada turística en la Isla. Para estas fechas, se considera que Menorca debe estar ya en perfecto estado de revista para recibir a los primeros visitantes, y esto incluye que su principal atractivo turístico, las playas, ofrezcan una buena imagen.

El servicio insular de limpieza que coordina el Consell ha acelerado estos días las intervenciones en las playas urbanas, hasta el punto de trabajar incluso de noche para llegar a tiempo. Para acometer estas actuaciones, la administración insular ha contado este año con un presupuesto un 15 por ciento inferior al del principio del mandato.

Esta reducción ha sido decidida por la conselleria de Cooperación Local, que asegura que a pesar de esta rebaja «no ha cambiado prácticamente nada porque se ha optimizado el servicio redistribuyendo algunos trabajos y reduciendo el número de embarcaciones».

El presupuesto para este año destinado a la limpieza de playas es de 803.660 euros, de los cuales el 57,8 por ciento son aportados por el Consell y el resto por todos los Ayuntamientos de Menorca excepto el de Es Castell.

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