Imagen de archivo de una sesión de la Junta Local este pasado verano | Josep Bagur Gomila

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En la Junta Local de Fornells no reina precisamente la concordia entre el PSOE y el resto de formaciones representadas, encabezadas por el presidente Ricard Riera. Ello se vislumbró de nuevo en la Junta del pasado lunes, cuando los dos miembros socialistas decidieron levantarse a mitad del pleno, retirar sus propuestas y abandonar la sesión.

El motivo, según los vocales del PSOE, es «la falta de respeto» del presidente hacia los socialistas, al «no utilizar el mismo criterio que al resto de formaciones» a la hora de dejarles exponer sus ideas, explica el vocal del PSOE Xavier Pinyol, quien lo atribuye «a la prepotencia» y a la «obsesión que tiene contra el PSOE» el presidente Ricard Riera.

La decisión de irse del pleno se tomó después de que, según los socialistas, «se nos hubiera cortado nuestro turno de palabra varias veces». Los socialistas estallaron cuando, según Pinyol, el presidente dejó expresar en el punto de dedicar una calle al que fue alcalde Miquel Petrus la justificación de voto a todos los vocales, excepto a los socialistas, y por ello decidieron marchar antes de finalizar la sesión. «No nos dejó hablar y expresar nuestra opinión» se lamenta.

El presidente Riera se defiende y recuerda que dió a los socialistas hasta tres turnos de palabra para hablar sobre esta cuestión, lo que para Riera demuestra que «respeto a todo el mundo, ya que pudieron decir lo que quisieron». Pese a ello, recuerda que «todos tiene derecho a hablar, pero cuando les toque», y asegura que «lo que no se puede hacer es no respetar a los otros cuando hablan». Afirma que la discusión se produjo con la normalidad de cualquier intercambio de opiniones: «Era un debate, se sintieron ofendidos, se molestaron y se fueron», algo que Riera respeta, aunque cree que ya «tenían el guión escrito».