La Sala de lo Contencioso Administrativo del TSJB condenó en 2011 al Consell, aceptó en 2013 el pago a plazos y ahora se siente engañada por la promotora. | Jaime Morey Rotger

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La promotora que estuvo a punto de llevar la bancarrota al Consell, Cesgarden, pretendía ganar, al menos, medio millón de euros en un día a costa de todos los menorquines. En la demanda incidental ahora definitivamente rechazada por el Tribunal Superior, la compañía hotelera reclamaba que se le abonasen 953.147,29 euros más los intereses transcurridos desde 2003 por el antiguo lloc de Sant Jaume de Dalt que el 24 de abril de ese año, apenas 24 horas antes de aprobarse el PTI, había adquirido a la mercantil Els Ebrells SL por 504.850,16 euros. Pedía «casi el doble de lo que, efectivamente, había abonado», reprende la Sala de lo Contencioso-Administrativo, quien recuerda, no obstante, que el perito judicial elevó el importe hasta la cifra, «muy alejada» de la actual, de 11.124.456,87 euros.

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Esta compraventa, anterior en un día al PTI y «en ocho años a la sentencia» de mayo de 2011 que condenó al Consell a indemnizar con 28,8 millones a la promotora, fue ocultada entonces al tribunal, lo que «determinó» -concluye- «que el resultado sobre este punto fuera incorrectamente tratado. A la hora de redactar la sentencia, el tribunal desconocía este supuesto, el de la compraventa», incide. E incluso Cesgarden le hizo creer que aún debía adquirir los terrenos de destino a donde se trasladaba su derecho a edificar el hotel, «lo que, ahora ya viene claramente determinado, es incierto». Eran suyos desde el día antes de aprobarse el PTI y, por tanto, con pleno conocimiento de su calificación urbanística.

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