El estudio confirma la alarma que se encendió hace doce años. | FELIX

TW
0

El análisis es una continuación de la alerta que se levantó ya en 2004 por parte del mismo equipo de investigadores. La conclusión es que, doce años después, la baldritja continúa volando hacia la extinción, algo que podría ocurrir dentro de 60 años.

Meritxell Genovart, autora principal del estudio e investigadora del Imedea, afirma que «la información disponible es escasa» aunque «la supervivencia anual sigue siendo alarmantemente baja, y todo apunta de nuevo hacia las capturas accidentales como su principal amenaza, lo que refuerza la necesidad de abordar este problema». Estas capturas accidentales se producirían durante actividades de pesca.

Pep Arcos, responsable del programa marino de Seo/Birdlife, comenta que ahora «el objetivo es realizar una evaluación lo más detallada posible de donde y como ocurren las capturas accidentales, y trabajar al lado de los pescadores y las administraciones para desarrollar, probar y poner en práctica las medidas de mitigación más eficaces».

Otra amenza es la presión que sobre los nidos ejercen depredadores como las ratas o los gatos. La falta de datos geográficos dificulta la actuación al respecto.