Municipios. Las urbanizaciones que no tienen alcantarillado se reparten entre seis municipios de la Isla. En la imagen de archivo, Binibèquer Nou

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La formación política Més insiste en que no tiene sentido aprobar una nueva moratoria del alcantarillado en las urbanizaciones y alargar en el tiempo un problema «que pone en riesgo la salud de las personas y del medio ambiente». Su diputado Nel Martí afirmó este domingo que «no vemos bien una nueva moratoria, y ya sería la cuarta, sin ninguna condición que obligue a enderezar esta situación».

No hay que olvidar, según los econacionalistas, que el incumplimiento de la normativa que exige la red de aguas residuales, con sucesivos aplazamientos, es uno de los orígenes de la contaminación de los acuíferos, por ejemplo con un exceso de nitratos que hace que en municipios como Es Castell el agua de consumo humano no cumpla los mínimos sanitarios.

En este sentido, Més avanza que solicitará al Govern y a los grupos que suscribieron los Acords pel Canvi una serie de medidas globales, «legislativas y ejecutivas», para que en los próximos años todos los núcleos urbanos tengan resuelto el sistema de saneamiento «ya sea vía red o vía otros sistemas descentralizados».


Exigencia solo teórica

Martí asegura que si no se presiona en este sentido y se aprueba otra moratoria (la idea es hacerla inicialmente de otros tres años, hasta 2019) el problema se eternizará. «¿Qué sentido tiene introducir una exigencia, con importantes repercusiones ambientales, si solo es teórica, ya que en la práctica la excepcionaremos todo el tiempo que haga falta», pregunta.

La crítica se dirige asimismo a los ayuntamientos, que «han tenido tiempo de sobra para adaptarse a una exigencia que hace muchos años que conocen», añade.

Según Martí, si se pueden seguir concediendo licencias para construir en núcleos y urbanizaciones sin alcantarillado -gracias a una nueva moratoria-, «evidentemente no tendrán ninguna motivación para cumplir con las exigencias de contar con servicio de alcantarillado en todo el suelo urbano».

En Menorca existen 39 núcleos en suelo rústico y una veintena de urbanizaciones o núcleos residenciales sin este servicio básico, funcionando con pozos ciegos. La mayoría se concentran en seis de los ocho municipios de la Isla, todos excepto Ferreries y Es Migjorn. Muchas de estas urbanizaciones están en Sant Lluís, pero también en Maó (Cala Llonga, Sa Mesquida) y Es Mercadal (Na Macaret o Addaia).