Los distintos negocios del puerto de Maó desde hace diez días ven como sus empleados y clientes tienen que pasar por caja para estacionar cerca de sus establecimientos

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Empresarios del puerto y del centro de Maó han iniciado sendas recogidas de firmas entre los afectados para expresar su malestar por la implantación a comienzos de este mes de novedades a la hora de aparcar, con las plazas de pago junto al mar y la zona verde en el casco histórico.

Empezaron antes en el centro. La iniciativa surgió de algunos establecimientos de la Plaça Bastió. Consideran que la zona verde para residentes se ha aplicado mal, y prueba de ello, dicen, es que las plazas están vacías durante buena parte del día. Aseguran que afecta a la cuenta de resultados de sus negocios, sobre todo aquellos que ofrecen servicios, como peluquerías, bares o restaurantes. La zona verde, explican, ha tenido un efecto disuasorio, porque el coche continúan siendo primordial. «Acabaremos todos en el polígono», comenta uno de ellos.

Este martes arrancó la campaña de recogida de firmas entre los distintos negocios del puerto de Maó, que desde hace diez días ven como sus empleados y clientes tienen que pasar por caja para estacionar cerca de sus establecimientos.


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