El Fons Menorquí de Cooperació lleva a cabo proyectos en los países menos desarrollados

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Es Migjorn y Ferreries son las únicas administraciones menorquinas que destinan más del 0,7 por ciento de sus ingresos corrientes a financiar proyectos de cooperación para el desarrollo, principalmente a través del Fons Menorquí de Cooperació. El esfuerzo financiero de las eCooperación,ntidades locales menorquinas es muy dispar, con diferencias que van del 1,4 por ciento de Es Migjorn, el municipio que más aporta en relación a sus ingresos, al 0,07 por ciento de Ciutadella, que, con una contribución 20 veces inferior en relación a su capacidad económica, cierra el ranking.

El análisis comparativo forma parte del informe elaborado por el vicepresidente del Fons Menorquí de Cooperació, Miquel Àngel Maria, y es el punto de partida de una propuesta para que los ayuntamientos y el Consell (su ayuda al desarrollo supone el 0,57 por ciento de los ingresos corrientes) aumenten progresivamente sus aportaciones hasta alcanzar en un máximo de diez años el objetivo del 0,7 por ciento marcado por Naciones Unidas.

La propuesta, que será debatida este jueves en la Comisión de Presidentes de Corporaciones Locales, tiene en cuenta el punto de partida de cada administración y especifica una planificación de aumento anual de las aportaciones que da más tiempo a los ayuntamientos que más alejados están del objetivo, los que proporcionalmente menos destinan al desarrollo, excluyendo de esta programación a los que ya lo superan. Los ayuntamientos que cumplen con ese objetivo son precisamente los que tienen los presupuestos más modestos, y su aportación supera incluso en números absolutos (Es Migjorn 10.000 euros y Ferreries, 26.000) a municipios con mayor capacidad económica como Alaior (8.000) y Es Castell (6.500).

Fondo para acoger refugiados

Según la proyección del llamado plan de regularización de las aportaciones, el Consell Insular se comprometería a destinar ese 0,7 por ciento en 2019, Sant Lluís y Es Mercadal lo harían en 2022, Maó en 2024 y Es Castell, Alaior y Ciutadella, en 2027.

Por otra parte el informe contiene otra propuesta que se pondrá sobre la mesa: que el próximo año las administraciones ya incluyan en sus presupuestos un aumento de sus aportaciones con un doble objetivo: iniciar ese plan de incremento paulatino y financiar la bolsa de viviendas que contempla el plan de acogida de refugiados diseñado por el Fons Menorquí de Cooperació, una bolsa de garantía que estará dotada con 113.400 euros, el coste del alquiler de 14 viviendas para acoger a 39 refugiados durante un año y medio.

La propuesta que debatirán los alcaldes estipula que el Consell se haría cargo del 30 por ciento de ese coste, mientras que el 70 por ciento restante se dividiría a partes iguales entre los presupuestos del Fons Menorquí de Cooperació y las aportaciones municipales, calculadas proporcionalmente en función de un criterio poblacional.