Un operario tira cable para llevar la fibra óptica a las viviendas del centro de Ciutadella. | David Arquimbau

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Menorca es uno de los territorios nacionales en el que el mercado de acceso a internet está menos diversificado. Una sola compañía, Telefónica, acapara el 72,2 por ciento del mercado insular, un porcentaje muy superior al que la operadora de servicios de telefonía e internet registra en el conjunto del país, donde acapara menos de la mitad de los clientes, el 42,6 por ciento. De hecho solo seis regiones registran niveles más bajos de competencia que Menorca –con las consecuencias de calidad del servicio y precio que ello tiene para los usuarios–. Son Ceuta y las islas de Formentera, La Palma, el Hierro, Fuerteventura y La Gomera.

La última resolución de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), recién publicada a partir de datos del año 2016, muestra, no obstante, el efecto de la irrupción de otras operadoras en el mercado menorquín. En 2012 Telefónica se llevaba una parte todavía más grande del negocio de internet en Menorca, el 81,5 por ciento. En cuatro años la multinacional del IBEX 35 perdió un 9,3 por ciento de cuota de mercado a pesar de las dificultades que tienen el resto de operadoras para acceder a Menorca, teniendo en cuenta que no existe cable submarino alternativo al de Telefónica para poder traer la alta velocidad a la Isla.

Mercado regulado

Entre los factores que han favorecido el crecimiento de otras operadoras en la Isla, según destacan desde la CNMC, se encuentra precisamente la regulación de las condiciones que Telefónica pone al resto de operadores para hacer uso de sus cables submarinos. La resolución del órgano que controla la competencia de los mercados da el visto bueno a la renovación de esas condiciones –basadas básicamente en la imposición de unas cantidades ajustadas a los costes para el alquiler de sus instalaciones– al entender que en Menorca, como en otros nueve territorios españoles, todos extrapenisulares, no se dan las condiciones para que haya una competencia efectiva.

En su análisis previo a la resolución, la CNMC hace especial hincapié en el «el gran despliegue» que en el periodo analizado han tenido las llamadas centrales bucle, la implantación de operadoras en Menorca que tiran su propio cable para llegar a las casas y empresas de la Isla. Asegura que «es muy destacable» que hayan pasado de tener una cuota de mercado del 2,5 por ciento al 14,7 por ciento en cuatro años, teniendo en cuenta que, al contrario de lo que ocurre en Eivissa, para acceder al mercado menorquín, además del uso de las redes troncales submarinas para conectarse a la Península, deben hacer uso del cable que Telefónica tiene instalado de Mallorca a Menorca, un doble coste que obviamente supone un freno para la presencia de una mayor competencia, aunque desde la CNMC destacan que a regulación ha provocado «avances significativos».

En Eivissa, donde las operadoras pueden hacer uso de un cable alternativo al de Telefónica para conectar con la Península, el de Islalink, la cuota de mercado de la operadora más longeva es del 61,8 por ciento, mientras que en 2012 era del 74,9. La competencia ha avanzado en esta isla a un mayor ritmo que en Menorca, con una reducción de cuota de Telefónica del 13,1 por ciento en cuatro años. Desde la CNMC consideran que es inviable para las empresas competidoras tender un cable propio que una la Isla con la Península, teniendo en cuenta el bajo número de potenciales clientes.

El informe también señala que va a la baja la presencia de las operadoras que se implantan con un acceso indirecto, que usan toda la red de Telefónica –hasta llegar a las casas y empresas. En 2012 representaban el 15,9 por ciento y en 2016 el 11,1 por ciento. También destaca la incipiente presencia –se refieren a 2016– de un operador alternativo que ya ha desplegado accesos de fibra a las casas, Infotelecom, que entonces tenía una cuota del 2,1 por ciento.