El complejo hotelero Milanos-Pingüinos de Son Bou | Gemma Andreu

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El Ayuntamiento de Alaior sigue trabajando para confirmar «todos los extremos de la legalidad» de la licencia del complejo hotelero Milanos-Pingüinos de Son Bou. Y avanza ya que «si se confirma que es legal levantaremos la suspensión y concederemos la licencia con todas las garantías y sin riesgos patrimoniales para nadie». Eso sí, descarta dar plazos. Así lo asegura el portavoz del equipo de gobierno, Cristóbal Marqués, tras las últimas informaciones aparecidas y, en especial, al informe del Govern que certifica la total legalidad de la edificación.

Marqués indica que «han ido apareciendo piezas de un enorme rompecabezas» y que «cuando tengamos la fotografía completa tomaremos una decisión». No existe aún certeza completa de esta legalidad aunque «estamos más seguros que antes de decretar la paralización de la licencia». Explica que el documento hecho público por el Centre d’Estudis Locals «es sesgado, solo se dio a conocer una parte de la licencia y se obviaron los condicionantes». Además, hace referencia a la ampliación realizada posteriormente y, en este caso, fuera de la legalidad. «Hay que analizar cómo afecta», señala.

El equipo de gobierno considera acertada su actuación de paralizar la licencia y pedir información a la Comisión Provincial de Urbanismo puesto que gracias a ello «hemos recabado mucha más información de la que teníamos antes, la situación está más clara hoy que antes de hacerlo» y se pregunta «qué hubiera pasado si llegamos a dar licencia sin estar seguros», por ello pide «prudencia y cautela» para que los técnicos puedan hacer su trabajo y poder avanzar con total seguridad.

Marqués se muestra sorprendido de que sea un político el que firme el informe del Govern y no un funcionario, además de advertir de que «es el mismo que se ha dedicado a poner palos en las ruedas al centro de salud de Alaior». Se refiere al director General Luis Corral. Pese a ello, considera que el informe aporta información interesante.

Tacha también de incomprensible que la oposición fuera quien solicitara inicialmente una suspensión de licencias y se haya posicionado totalmente en contra de la reforma de los hoteles y ahora «presione al Ayuntamiento a dar la licencia aun habiendo dudas sobre su legalidad». Da la sensación, dice, «que quieren empujarnos a conceder licencia para luego criticarlo».