El gasto que realizan los turistas en Menorca sigue creciendo a pesar del descenso de visitantes. | Archivo

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La pérdida de visitantes –cerca de 18.000, un 2,6 por ciento– que ha sufrido Menorca en los meses centrales de la temporada, julio y agosto, no ha supuesto un freno para el negocio turístico. Los resultados de la encuesta Egatur hechos públicos ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE) muestran un dato global de gasto turístico nunca visto antes. Los turistas que llegaron a Menorca en temporada alta desembolsaron 680,59 millones de euros, lo que supone un incremento de 21,18 millones, un 3,2 por ciento, en relación al mismo periodo del año pasado.

Ese aumento del gasto turístico aun con menos visitantes se explica principalmente por el importante incremento del desembolso de los turistas, que de media diaria se han dejado en los meses de julio y agosto 132,75 euros, 7,72 más que hace un año, lo que representa una subida interanual del 6,1 por ciento, la mayor del Archipiélago, que ha permitido al destino mantener la senda del crecimiento en el negocio turístico con una menor presencia de visitantes.

En el acumulado del año, los ocho primeros meses han dejado un balance de 1.078,85 millones de euros, 28,24 millones más que en el mismo periodo de 2017, un aumento del 2,68 por ciento que se concentra especialmente en los meses punta de la temporada. Solo en dos meses del año, febrero y abril, se han registrado descensos interanuales en el desembolso de los visitantes.

Un análisis del detalle de las cifras de gasto turístico permite observar a dónde va el dinero que los visitantes destinan a sus vacaciones en Menorca. De esos 680,59 millones de gasto global en julio y agosto, la mayor parte, el 64,2 por ciento, no está incluido en el paquete turístico. Fuera de esas vacaciones paquetizadas, la partida que más se ha visto incrementada es la destinada al alojamiento, al que se han dedicado 123,06 millones de euros, un 7,47 por ciento más que hace un año.

De hecho el mayor aumento del gasto se produce entre aquellos turistas que llegan para alojarse en la oferta hotelera de Menorca, así como en los que vienen a disfrutar segundas residencias o a albergarse en casas de amigos y familiares, mientras que el gasto de los que optan por los alojamientos de alquiler ha descendido ligeramente.

También la partida de manutención, el gasto en bebidas y comidas no incluidas en la contratación del hotel, ha aumentado, en este caso un 6,9 por ciento hasta los 111,67 millones de euros. En menor grado se ha incrementado el gasto en actividades en el destino, casi un tres por ciento, hasta los 67,68 millones de euros.

En el otro lado de la balanza se sitúa el gasto en transporte, el que menos incide en el destino, ya que abarca no solo los desplazamientos para moverse por Menorca, sino también el coste de los billetes de avión o barco para llegar a la Isla. Esa partida ha vivido un descenso del diez por ciento en relación al año pasado, hasta quedarse en 67,47 millones.