El cable entre Menorca y Mallorca se puso en funcionamiento el pasado 17 de junio tras más de 900 días de aislamiento eléctrico

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La primera en la frente. La propuesta inicial de Desarrollo de la Red de Transporte para el horizonte 2021-2026 que el operador del sistema, Red Eléctrica, ha hecho llegar a la Secretaría de Estado de Energía no incluye el segundo enlace submarino entre Menorca y Mallorca como una actuación prioritaria. Lo revela el informe que acaba de emitir la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) como parte del proceso de elaboración del plan de inversiones en la red de transporte eléctrico para los próximos seis años, que aún está en una fase inicial, a la espera, entre otras cosas, de recibir alegaciones por parte de las Comunidades Autónomas. Hay tiempo para que la decisión sea reconsiderada antes de recibir el visto bueno del Ministerio para la Transición Ecológica.

El informe de la CNMC sobre la propuesta inicial en la que Red Eléctrica ha trabajado en los últimos meses revela que el segundo enlace entre Mallorca y Menorca está presente en la planificación, pero como una inversión prevista para «más allá de 2026». También concreta que el proyecto incluye entre otras actuaciones, 15 nuevas posiciones distribuidas en «dos nuevas subestaciones». El coste estimado para todo el paquete de inversiones es de 130 millones de euros, además de un coste anual de operación y mantenimiento de dos millones.

Cabe recordar que tanto los planes del Govern para la transición energética de la Isla, como la estrategia Menorca 2030, la hoja de ruta para la descarbonización del sistema eléctrico validada por la Comisión Europea, trabajan sobre el escenario de que el segundo cable estará ya operativo en el año 2025. El aplazamiento de esa inversión hasta más allá de 2026 trastoca los planes de las administraciones autonómica e insular, que en 2025 ya prevén una conexión con Mallorca operada a 100 megavatios (MW), cuando con el cable actual, puesto en funcionamiento el pasado 17 de junio, en principio está previsto que la operativa sea de 35 MW. Entre las consecuencias más evidentes de ese aplazamiento está el papel de la central de Maó, que por esas fechas se preveía que fuera una mera instalación de soporte y que quizá tendrá que alargar su papel fundamental como generador de energía.

El segundo fue el primero

Resulta pertinente también recordar que el segundo enlace entre Mallorca y Menorca sí que figuraba en la anterior planificación de inversiones para la red de transporte, relativa al periodo 2015-2020. Esa planificación tuvo que ser modificada puntualmente después de que el primer enlace dejase de operar en noviembre del año 2017. La solución fue reconducir el proyecto para el segundo cable con el objetivo de restablecer cuanto antes la conexión perdida entre Mallorca y Menorca.

Destacar asimismo que en el ámbito de las inversiones para los sistemas no peninsulares sí que está prevista como inversión a ejecutar entre los años 2021 y 2026 el segundo enlace entre Mallorca y la Península, así como un refuerzo de la conexión eléctrica entre Eivissa y Formentera.