La alcaldesa Joana Gomila y el concejal Andreu Cardona conversan en el teatro, que reabrirá sus puertas este mes después de permanecer cerrado desde 2006.

La alcaldesa Joana Gomila y el concejal Andreu Cardona conversan en el teatro, que reabrirá sus puertas este mes después de permanecer cerrado desde 2006. | Josep Bagur Gomila

Fela Saborit04/10/20 0:36
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La esperada noticia de la reapertura del Teatre des Born tiene un sabor agridulce para el Cercle Artístic de Ciutadella. En principio la fecha elegida para alzar de nuevo el telón en el coliseo, el 30 de octubre, un mes siempre ligado al Premi Born de Teatre, parecía ser el motivo del malestar generado en la entidad, que entregará sus preciados galardones seis días antes, el 24, en la Sala Polivalente Canal Salat. Pero ayer su presidenta Lina Pons Massanet, matizó los motivos de este desencuentro con el Ayuntamiento.

«A nosotros no nos preocupa que la entrega del premio no se utilice para la inauguración del teatro, nuestra preocupación va más allá», explicó, y es que el verdadero disgusto de la junta directiva –que tenía previsto reunirse ayer tarde–, viene porque, al prepararse la reapertura, «no se tenga en cuenta el Premi Born como un acto más dentro del programa de la inauguración». Es decir, que después de más de 14 años exiliados del escenario natural para la entrega de los galardones teatrales, el Cercle cree que por lo menos estos deberían tener un protagonismo dentro del programa del acto inaugural. Cabe recordar que este será de carácter institucional, según ha anunciado el Consistorio, y se complementará con la obra «Losers», con un elenco muy reducido y un aforo limitado al 50 por ciento debido a las exigencias de la normativa sanitaria para prevenir contagios de covid-19.

Lina Pons señaló asimismo que el cambio de fechas de la entrega del Premi Born, a veinte días de que se celebre la gala, es inviable.

Por motivos logísticos obvios es extremadamente complicado mover agendas en un certamen que requiere un exhaustivo trabajo de preselección de obras y de deliberación del jurado; las bases están cerradas y también las fechas, lo que implica que los desplazamientos de los asistentes se concretan con semanas de antelación. El Premi Born de Teatre llega este año a su XLV edición con un récord histórico de obras participantes, un total de 571, más del doble que en 2019, cuando entraron 228, y muy por encima del récord hasta hoy, los 260 textos de 2017.