La apertura de un corredor turístico con Reino Unido se enfría a corto plazo . | David Arquimbau Sintes/EFE

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La virulencia de la segunda ola de la pandemia de covid-19 ha dado al traste con la principal estrategia de recuperación turística a corto plazo, la apertura de corredores seguros con países emisores. Tanto la presienta del Consell, Susana Mora, como el conseller balear de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, asumieron ayer que con la actual situación epidemiológica no será posible abrir esos puentes turísticos hasta el año 2021. En ese escenario trabajan, con la intención de adelantar lo máximo posible la actividad turística de la próxima temporada, a poder ser en el mes de marzo.

Los dos dirigentes aludieron a las palabras de la ministra de ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, quien admitía en declaraciones al canal 24h que «los datos epidemiológicos de España y el adelanto de la segunda ola, que también está sufriendo Europa, nos ha hecho más difícil poder plantear estos corredores». La ministra reconocía incluso que «llegamos tarde», pero matizaba que la causa es la situación sanitaria, que «ha retrasado la toma de decisiones».

Mora reconocía ayer al respecto que «la estrategia turística a corto plazo se había fijado en las últimas semanas en la posibilidad de abrir un corredor seguro», una posibilidad que se pretendía para este invierno y que se ha enfriado a corto plazo. La presidenta del Consell aseguró que la máxima prioridad «sigue siendo contener el virus» y prepararse a medio plazo para «estar lo mejor posible en marzo» para que la próxima temporada se pueda avanzar lo máximo posible. No en vano recordó que la situación epidemiológica ha empeorado notablemente en Menorca en solo una semana.

Por su parte, el conseller Negueruela aseguró que se sigue trabajando en la apertura de esos corredores, negociando con los países emisores y teniendo en cuenta las diferentes necesidades de cada isla como destino turístico. El objetivo es «abrir cuando sea posible, pero con la vista puesta en 2021». También destacó la difícil situación del Reino Unido y la incoherencia que supondría abrir el turismo cuando está pidiendo a sus habitantes que se queden en casa y cierra bares y restaurantes.