Alumnos abrigados y con mascarilla en clase este curso. | Josep Bagur Gomila

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Si la evolución de la pandemia lo permite, en septiembre los estudiantes regresarán a las aulas en un curso «normal pero con la máxima prevención higiénica», porque habrá presencialidad en todos los niveles aunque eso sí, con mascarilla dentro y fuera de clase.

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Así lo afirmó ayer el presidente de la Asociación de Directores de Enseñanza Secundaria de Menorca (Adesme), Miquel Àngel Casasnovas, después de asistir al encuentro por videoconferencia de la mesa de diálogo entre Educación y los directores de centros de Balears. La reunión, previa a la publicación en el Butlletí Oficial de les Illes Balears de la resolución con las medidas preventivas anti-covid del próximo curso, se centró en el tema de la seguridad sanitaria, que ha dado buenos resultados y, pese a las dificultades, ha permitido seguir con los colegios e institutos abiertos sin que estos hayan sido foco de contagios.

«Ha sido un curso muy complejo, con las rotaciones, las clases on line y la semipresencialidad, pero hay que tener en cuenta que en algunos países se han cerrado las escuelas», señaló el presidente de Adesme, «el año que viene el curso se acercará más a la normalidad» de los tiempos previos a la pandemia, salvo que se mantendrán medidas como la higienización y limpieza al máximo, la ventilación, la mascarilla –podría suprimirse en los patios si se aprueba prescindir de ella en la calle, a nivel general–, y la distancia interpersonal, que pasará de 1,50 a 1,20 metros. Este último cambio aumentará los metros cuadrados disponibles y permitirá volver a la presencialidad así como recuperar espacios en los centros. «Son previsiones de aquí a tres meses, pero pensamos que la situación es favorable y mejorará a medida que avance la vacunación, también en los adolescentes», añadió.