La titularidad de la urbanización lleva ya varios años en discusión. | Gemma Andreu

TW
0

El enrevesado proceso de recepción de la urbanización de Sant Tomàs por parte del Ayuntamiento de Es Migjorn Gran se enrevesa un poco más. La sociedad promotora del núcleo turístico, Agrytursa, ha optado por trasladar a los tribunales sus desavenencias con el Consistorio sobre la subsanación de algunas anomalías. Hace apenas unos días interpuso un recurso en el Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 3    de Palma contra el decreto de alcaldía que en junio desestimó el recurso de reposición presentado por la empresa como último intento para hacer valer por la vía administrativa sus alegaciones, que habían sido previamente rechazadas por el equipo de gobierno.

No es la primera vez que el asunto de la recepción de Sant Tomàs pasa por los juzgados. En 2017 Agrytursa presentó una demanda contra la denegación por silencio administrativo de la solicitud de recepción de las obras de la urbanización por parte del Ayuntamiento. El caso llegó al Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 2 de Palma, pero la promotora lo paró después puesto que prefería intentar llegar a una solución por la vía administrativa.

Tira y afloja

Hace un año, por estas mismas fechas, el Consistorio liderado por Antònia Camps dio un plazo de noventa días a la promotora para realizar los arreglos y la subsanación de las deficiencias señaladas por los servicios técnicos municipales en un informe de octubre de 2018. Agrytursa presentó objeciones a este requerimiento, al entender que no le corresponde llevar a cabo estas actuaciones. Casi todas sus alegaciones se rechazaron, con lo que el Ayuntamiento de Es Migjorn comunicó que asumiría las obras para luego pasarle la factura. Las intervenciones en cuestión hacen referencia a servicios y pavimentos en mal estado. Un informe técnico responsabiliza a la empresa de estos problemas, algo que esta no comparte.