Imagen de la reunión de alcaldes celebrada este jueves en El Toro, donde se debatió sobre el servicio de taxi en temporada alta. | Josep Bagur Gomila

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Montse Morlà, consellera de Movilidad, planteó ayer tres propuestas a los alcaldes de Menorca para mejorar el servicio del taxi, después de que un año más, su funcionamiento haya provocado numerosas quejas entre clientes, hoteleros y restauradores.

La consellera expuso a los primeros ediles en la reunión de El Toro la necesidad de aplicar medidas para ganar en fluidez y acabar con las carencias, especialmente en los meses de mayor crecimiento poblacional. Las tres propuestas recibieron una buena acogida por lo que podrían entrar en vigor la próxima temporada estival, aunque deberán tratarse en cada corporación considerando la sensibilidad hacia el colectivo para evitar conflictos que ningún representante municipal desea tener.

Recoger clientes en toda la Isla

Modificar el régimen especial de recogidas de las licencias temporales fue una de las iniciativas que trasladó Montse Morlà en la reunión. Los taxis eventuales podrán cargar clientes en cualquier lugar de la Isla al que se hayan dirigido por una carrera, ya que tienen vetada esta opción exclusiva de los taxistas con licencia ordinaria. «Es absurdo que un temporal deje a unos clientes en un hotel y no pueda cargar a otros que están en espera en el mismo lugar», explicó la consellera.

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De prosperar esta propuesta, deberá ser aprobada primero por el pleno de cada ayuntamiento y posteriormente por el del Consell.

Vigilar las malas prácticas

La mala praxis de algunos profesionales también incide en las deficiencias del servicio. Es por ello que Morlà propuso ayer que cada consistorio haga un seguimiento del que le corresponde. La consellera ofreció como solución menos gravosa que los policías locales que están en segunda actividad y mantienen su retribución sean los que se encarguen de este cometido.

En el encuentro se comentaron las prácticas irregulares de algunos profesionales que entregan comisiones a ciertos establecimientos para que se dirijan a ellos cuando tengan clientes. Esta costumbre va en detrimento de la fluidez del servicio y perjudica a los conductores más jóvenes.

Facilitar los exámenes para chóferes

La tercera iniciativa va dirigida a facilitar el acceso de nuevos taxistas pidiendo a los Ayuntamientos que los exámenes para conceder las licencias sean más prácticos y accesibles, es decir, que incluyan menos normativas y preguntas enrevesadas y se ciñan a recorridos y ubicaciones de la Isla y el municipio donde se realicen. De la reunión de ayer surgió la opción de que sea el Consell quien organice el examen general para todos los aspirantes incorporando cada Ayuntamiento algunas preguntas propias de su municipio.