Dos operarios trabajan en las obras de rehabilitación de una casa entre medianeras.

TW
21

El tiempo de tramitación de una licencia de obras en Ciutadella era en septiembre del año pasado de 384 días. En el segundo trimestre de 2022 la demora se mide en 766 días. En Maó, en esas mismas referencias de tiempo se ha pasado de 410 días a 584 y en Alaior, de 466 a 440, si bien en este caso el Ayuntamiento publica con retraso en la web la información de la que se nutre la comparativa que realiza la demarcación menorquina del Colegio de Arquitectos.

Este señala que no se aprecia una mejora «sino el mantenimiento cuando no ralentización del tiempo que pasa entre la presentación de un expediente y su autorización, especialmente en Ciutadella, y en todos los casos superior al año». Detecta además una dispersión muy acentuada entre expedientes, «que puede pasar de cuatro meses en algún caso muy puntual a más de cinco años».

125 licencias

En los doce meses comprendidos entre septiembre del 21 y agosto del 22, entre los tres ayuntamientos han tramitado 125 expedientes, de los cuales más de la mitad corresponden a Maó, 65, y 12 a Alaior.

Los arquitectos destacan el caso de Ciutadella, «con un parque edificado muy extenso, donde no solamente los plazos de concesión de licencias son largos sino que además se conceden menos licencias (48 en un año) que en Maó». Aduce que probablemente se debe a    un elevado volumen de obra menor, que no se contabiliza en ese listado y apunta que no puede desconocerse «la relación entre retraso de la tramitación y la disminución de petición de licencias con el consiguiente peligro para la calidad y seguridad en el trabajo».

La nota del Colegio de Arquitectos concluye con la inquietud que estos tempos administrativos despiertan ante la concesión de fondos europeos para obras de eficiencia energética, que exigen una mejora de la tramitación de licencias para que las ayudas de los Next Generation «no queden bloqueadas».