Estación de bombeo en Cala Figuera de las aguas residuales de Maó | Gemma Andreu

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Entre las carencias que registra el sistema de saneamiento de Maó figura el de los vertidos de aguas sucias al puerto. Ocurre siempre que se sobrepasa su capacidad, cuando el caudal provocado por lluvias torrenciales revienta por los aliviaderos. Al no disponer de red separativa, las aguas residuales del alcantarillado de la ciudad, mezcladas con las de lluvia, van a parar al mar.   

Solucionar esa situación, prohibida además por una ordenanza municipal y el Plan Hidrológico de Balears, es uno de los objetivos que aborda la revisión del Plan Director de Saneamiento, presentado ayer por el alcalde Héctor Pons y el equipo de Tragsatec que lo ha redactado.

La propuesta consiste en construir redes separativas de residuales y pluviales y en evitar que todas las aguas confluyan como ahora en la red que discurre por el puerto camino de Cala Figuera, desde son impulsadas a la depuradora ubicada en Es Castell.

Para ello, ha de construirse el colector sur, planteado desde hace dos décadas y que discurririría a la altura de la Vía de Ronda, y otro nuevo colector este-oeste que discurriría por el eje del casco urbano (Josep Maria Quadrado y Josep Anselm Clavé). De ese modo, con red separativa en ambos casos, se descargará el alcantarillado del puerto de dos terceras partes de su caudal.

Otras actuaciones consisten en la construcción de tanques receptores de las primeras lluvias de tormenta, las más sucias, en las distintas cuencas naturales de la ciudad. Esas aguas serían vertidas una vez decantados los residuos que arrastra la lluvia.

El primero de ellos se ubicará en el entorno de la Casa de Mar y captaría las pluviales de Dalt Sant Joan, calle del Sol e Isabel II. Otro, en consonancia con el colector este/oeste iría en la Punta de Cala Figuera y en el tercero, junto a la actual estación de bombeo, desembocaría la red paralela al colector sur.

En la zona de Autoridad Portuaria se construiría otro para absorber el caudal que fluye hacia la costa de Ses Voltes.

Núcleos costa norte

El Plan Director, diseñado con una utilidad a 25 años vista, aborda asimismo la tarea pendiente en saneamiento en los núcleos de la costa norte. Prevé redes de impulsión de aguas residuales de todos ellos (Sa Mesquida, Es Murtar, Cala Llonga y Sant Antoni) y una estación de bombeo en el Cós Nou para conectar a la red de la depuradora.

Para el Polígono, que sufre importantes episodios de inundación por pluviales, se prevén acciones puntuales para corregir la situación.

Las actuaciones contempladas no tienen plazo de ejecución por cuanto serán desarrolladas como proyectos independientes