Un momento de la celebración de la vista oral en la Audiencia Provincial en Palma. | Alejandro Sepúlveda

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La mujer acusada de un delito contra la salud pública ha sido condenada a tres a años de privación de libertad y a una multa de 11.000 euros. La pena rebaja considerablemente la petición prevista en la acusación de la Fiscalía, que inicialmente solicitaba cinco años de prisión y una multa de 33.106,95 euros.

La rebaja es consecuencia del acuerdo de conformidad alcanzado entre la defensa de la acusada, representada por la letrada Ángeles López, y la fiscal que ha llevado el caso. Para ello se ha tenido en cuenta la atenuante de drogadicción de B. V. J. M., la mujer que compareció ayer en Palma ante el tribunal de la sección segunda de la Audiencia Provincial.

Otro de los factores que han influido en la benevolencia de la pena es la carencia de antecedentes, además de no haber cometido ningún otro delito desde los hechos por los que ha sido juzgada, según explica la defensa. El Tribunal ha tenido en cuenta que no se trata de una delincuente habitual.

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