Cadena de voluntarios. A falta de ascensor y de máquinas elevadoras, así suben los voluntarios de la Illa del Rei, los ladrillos de Landino para embaldosar la planta superior del hospital británico. Ahora serán sancionados.   

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Siete años después, y tras el cambio de gobierno en la primera institución política menorquina -léase de Susana Mora a Adolfo Vilafranca-, el Consell retoma y reclama a la Fundació de l’Hospital de l’Illa del Rei una sanción de 60.000 euros por una de las actuaciones de mejora llevada a cabo en los edificios del hospital naval británico.

El decreto ucase con el procedimiento sancionador, por un expediente incoado en 2017, fue notificado este 12 de febrero a los voluntarios que encabeza un animoso Luis Alejandre Sintes. Desazonados y atribulados, descubren que son sujetos pasivos de una multa de 59.307,10 euros, y esta misma cantidad se impone al arquitecto de la fundación, Miguel Sintes Coll.

«Luis, la actividad altruista de voluntario en la Illa del Rei se ha convertido en una labor de alto riesgo económico», manifesté al general el martes, en el transcurso de la reunión que celebró la comisión organizadora del Foro Menorca Illa del Rei 2024.

Porque aún cuando la entidad que, durante veinte años, ha dedicado sus esfuerzos, tiempo y recursos a salvar el patrimonio monumental que atesora la Illa del Rei, carece de ánimo de lucro, no se libra de la voracidad recaudatoria por una presunta infracción.   

¿Aconseja el sentido común proseguir con la tramitación de un expediente iniciado hace siete años en el seno del ‘Consorci per a la protecció de la legalitat urbanística en el sol rústic de l’illa de Menorca’? En cualquier caso, habría que exigir primero explicaciones a los funcionarios encargados de gestionar estos papeles por tan dilatado plazo. E incluso, ¿cabe invocar la prescripción?

La disolución       

Dolidos y desconcertados, los voluntarios de la Illa del Rei, perseguidos hoy como vulgares infractores de una legalidad urbanística que demanda muchas explicaciones, constatan los vaivenes del mismo inspector del consorcio al valorar el importe de las obras.

Así, el 2017 lo cuantificó en 4.000 euros, pero en enero de este año lo eleva a 21.000 euros. La mecánica aplicación de una sanción del 300 por cien sobre los trabajos realizados multiplica exponencialmente la doble multa, a la fundación y al arquitecto Sintes Coll.

«La ejecución de las sanciones propuestas entrañarían la disolución de la Fundació de l’Hospital de l’Illa del Rei, tras nombrar la Junta de Patronos una reglamentaria Comisión Liquidadora», advierte, anonadado, Luis Alejandre.

¡Vaya regalo para el aniversario de los 20 años de la fundación! Un marrón/papeleta que han heredado el presidente Vilafranca y la consellera Núria Torrent, que ahora han de resolver el entuerto iniciado por otros hace siete años.

60 sobre 4.759           

¿Y de qué estamos hablando?, pues de una superficie de 60 metros cuadrados en la Capilla Anglicana de la Illa del Rei, que forma parte del proyecto de recuperación de 2.487 metros cuadrados en la planta baja y otros 2.272 en el primer piso de las grandiosas construcciones hospitalarias británicas. El Consell, a través del Consorci en sòl rústec, cuestiona y pretende sancionar    una ínfima obra en el conjunto de una superficie de 4.759 metros cuadrados.

Y como cada uno ha de ser responsable de sus propios actos, es cierto que el arquitecto Miguel Sintes aparece en los documentos que ahora le convierten en perseguible y sancionable, pero «no es responsable de su ejecución, que creíamos de buena fe incluida en las licencias tramitadas por la Sra. Espiau, su antecesora», desvela la fundación.

El origen de este desatino tiene nombre y apellidos: Isabel Espiau, que había gestionado las obras del enclave desde 2006. La arquitecta protagonizó un triste desencuentro cuando la Junta de Patronos determinó su cese como presidenta de los voluntarios y que Alejandre -que renunció por incompatibilidad como conseller de Movilidad del Consell- volviera a desempeñar la presidencia.

En cualquier caso, ¿existe la licencia de obras, concedida en el siglo XVIII, para construir el hospital de la Illa del Rei?

El presidente de ASHOME, Sebastián Triay Fayas, con los alumnos de la Escuela de Turismo de Balears en Menorca.

Visita de Jet.2     

Este lunes empieza la visita que los altos directivos del mayorista Jet.2 llevarán a cabo durante dos días a la Isla para conocer diferentes zonas y espacios de Menorca.     

La Asociación Hotelera de Menorca ha preparado un amplio programa de actividades con la Fundación Fomento del Turismo de Menorca. El presidente de Ashome, Sebastián Triay Fayas, que se caracteriza por su inquietud, explica que Jet2.com arranca la temporada en Menorca a principios de abril. Ofertará 195.000 plazas, lo que supone un aumento de 12.000 respecto al 2023. La principal novedad consiste en un vuelo directo con Liverpool.

Preguntas de la semana

  • ¿Por qué no se gestionó ni aplicó el ‘plan Alejandre’ de aparcamientos en rústico que prevé la NTT de 2014?     
  • ¿Cuándo estará redactado y cuándo se conocerá el informe del Consell sobre la compatibilidad de los dos cargos públicos de Eduardo Robsy?     
  • ¿Avala la Policía Local de Ciutadella el Plan de Movilidad Urbana Sostenible que prevé peatonalizar Es Born?     
  • ¿Cuáles son las exigencias y los temas de debate que suscita la posible moción de censura en el PSM-Ciutadella?                       
  • ¿Por qué Correos ha reducido en un 28 por cien la plantilla de trabajadores en Menorca los últimos cinco años?