Editorial07/07/17 0:00
TW

El acuerdo, alcanzado in extremis por PSOE, Més y Podemos en la tarde del 3 de julio de 2015, permitió que Maite Salord, candidata de Més, fuera investida, al día siguiente, presidenta del Consell insular. El pacto incluyó el relevo de Salord por la candidata del PSOE, Susana Mora, que se formaliza esta tarde tras la renuncia de quien ha desempeñado estos dos años la presidencia de la primera institución política menorquina.

En el ecuador del mandato la gestión del gobierno tripartito presenta claroscuros y asignaturas pendientes. Han dado comienzo las obras en el tramo Ciutadella-Ferreries de la carretera general, pero sigue paralizado el tramo Maó-Alaior, tras la rescisión del contrato sin reclamación por la adjudicataria.

No ha sido posible la transferencia de la promoción turística, comprometida para el 1 de enero de este año; el proyecto para el Lazareto debe concretarse; y la revisión del Plan Territorial Insular se solapa con la derogación parcial de la Norma Territorial Transitoria. En el aire, el alquiler turístico vacacional, la demanda de vivienda, la candidatura Menorca Talayótica y los proyectos municipales costeados con la ecotasa. Quedan aún dos años por delante.