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La ‘ley de minimis’, una normativa de la Unión Europea que regula la concesión de ayudas para reducir el coste del transporte de mercancías, establece una cantidad límite de 200.000 euros a percibir durante tres años, con independencia del monto total. Estos criterios penalizan a las empresas de Balears, tal como ha denunciado reiteradamente el Cercle d’Economia de Menorca. La entidad que preside Francisco Tutzó ha advertido que mientras Canarias cuentan con una bonificación del cien por cien en el transporte de mercancías, tanto en los trayectos aéreos como marítimos, las empresas de Balears reciben únicamente una subvención del 35 por cien en las rutas por mar y del 65 por cien en las rutas aéreas.

El Govern ha puesto este problema sobre la mesa del Ministerio de Fomento, que anuncia el inicio de los trámites, ante la UE, para suprimir este límite. Las Balears, a diferencia de Canarias, no es una región ultraperiférica, pero también somos islas. La distancia con la península, así como el PIB y la actividad económica de nuestro archipiélago justifican la aplicación de estas ayudas en Balears para evitar que sea vulnerada la libre competencia en el ámbito de la UE. Hay que eliminar este tope.