El largo proceso electoral abierto el viernes para las generales del 28 de abril, que no se cerrará hasta las municipales y autonómicas del 26 de mayo, está propiciando una campaña extraña, tensa e incluso bronca. Los incidentes se suceden, con las ofensivas pintadas en las sedes de varios partidos de Palma a principios de abril, reivindicadas por una desconocida Juventud del Frente Obrero; los cristales rotos en la farmacia del expresidente José Ramón Bauzá en Marratxí; el intento de boicot de un acto con Cayetana Alvarez de Toledo en la Universitat Autònoma de Barcelona; desórdenes públicos durante la presentación de Ciudadanos en Rentería, que concluyó con cargas policiales de la Ertzaintza y cuatro detenidos; y agresiones a militantes de Vox en el País Vasco. Mucha tensión, demasiados incidentes y descalificaciones. El exceso marca esta campaña, que no puede transformarse en un campo de batalla en el que se persigue el descrédito o el desprestigio del adversario. Ha de ser un espacio para el debate, sereno e inteligente, de propuestas y alternativas.
Demasiada tensión e incidentes marcan la campaña electoral
16/04/19 0:45
También en Opinión
- Detenida a su llegada a Menorca una okupa de Son Parc con 160 gramos de heroína y cocaína
- La presencia de ratas aviva las críticas contra el sistema de basura puerta a puerta en Es Castell
- Mercè Rubió dimite del patronato de la fundación que impulsó su padre con una dura carta
- Los propietarios de Binibèquer Vell activan este miércoles la reducción del horario de visitas
- Fallece Pere Oleo Cortés, el sacerdote que dedicó 44 años a la parroquia de Alaior