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Dicen que la música ayuda a aplacar a las fieras (y no solo la humana, la peor de las especies sin duda) pero una canción también puede ayudar a recordar momentos precisos de la vida de una persona. Efectivamente, una canción puede evocar las primeras sensaciones vividas, los primeros ligues, el primer beso, la primera desilusión, aquella fiesta, aquel viaje, aquel verano, aquella mujer, aquel hombre… Escuchar una canción no te regala sólo el placer momentáneo de su audición sino que puede ser también un "déjà vu" que revive escenas pasadas que muchas veces desembocan en la nostalgia.

Mi querido amigo Pedro J. Bosch me manda por mail un archivo con canciones de "la radio de nuestra infancia". Es decir me obsequia con recuerdos de tiempos pasados. Y naturalmente se abre el baúl de los recuerdos.

Los de mi generación, allá por los primeros y mediados sesenta, comenzamos admirando al Dúo Dinámico y escuchando a José Guardiola, Gelu, Lita Torelló, Los Catinos, etc. Eran tiempos del Festival del Mediterráneo. La música italiana tenía su mina difusora en San Remo de donde procedían las canciones que suministraban buena parte de la música de aquellos "bailes de casa" de los sesenta (aquellas reuniones en que los chicos se ponían a tope mientras las chicas cruzaban píamente sus brazos sobre sus pechos e interponían los codos entre los dos cuerpos para evitar rozamientos pecaminosos mientras bailaban). "Sapore di sale, sapore di mare, che hai sulla pelle, che hai sulle lappra ….."(Gino Paoli, nº 1 en España en 1964).

A mediados de aquella década ya se comenzó a notar en España la influencia del rock anglosajón y después de conocer a Bruno Lomás, los Teen Tops, etc. muchos nos pasamos a los Sirex, los Mustang, Los Salvajes, … (copias nacionalizadas de los Beatles y los Rolling Stones) y adoptamos también a los Brincos y a los Bravos. Y ya a partir de entonces, y durante un tiempo, se interrelacionaron dos líneas musicales: la música italiana y la británica, sin olvidar la francesa: Adamo, Aznavour, Dutronc, Antoine, Polnareff, Hervé Villard, Sylvie y, por supuesto, Johnny.

A partir de ahí cada uno eligió su camino. Unos nos encaminamos hacia el rock, el jazz y el blues (la base filosófica de toda la música rock), aprendimos bien el "twelve- bar- blues", formamos grupos, actuamos en muchos sitios, "vam fotre moltes empastes" pero nos divertimos. Otros permanecieron fieles a lo melódico.

Uno no pertenece al lugar donde ha nacido sino donde se ha criado, donde ha reconocido el mundo. La infancia marca al ser humano. La música también marca porque tiene carácter propio. Alguien ha escrito que uno se define según la música que ha escuchado en su vida. Debe ser cierto. Hay músicas que quitan velos aldeanos. Las influencias son decisivas en la formación de un hombre.

¿Qué significó aquella música de los años sesenta en un ambiente donde el franquismo todavía imponía su ley? Pues creo que fue una punta de lanza a favor de la libertad. Franquismo y rock tuvieron que convivir, que soportarse.

Hace un tiempo un amigo me preguntó ¿lo pasamos tan mal durante el franquismo? En el balance personal y vital de cada uno está la respuesta y ya sabemos que en esta vida cada uno cuenta la historia según le ha ido. Sabemos del sufrimiento de muchos ciudadanos pero otros no lo pasaron tan mal. Esa fue la causa por la cual el General Franco murió en la cama. Por eso muchos le lloraron. Por eso hubo una transición pacífica.

Nuestra generación no hizo la guerra, sólo vivimos sus consecuencias en parte. Sólo en parte. Ya que ¿no pudimos estudiar?, ¿no pudimos viajar?, ¿no pudimos escuchar nuestra música preferida?, ¿no pudimos leer? ¿no pudimos ligar? ¿no pudimos trabajar?....en suma ¿no pudimos vivir? ¿Vivimos tan mal? Cada uno debería de responder a esas preguntas sin clichés prefabricados. Sin mentirse a sí mismo.

Lejos de mí la intención (que algún cretino me adjudicará) de preferir tiempos políticos pasados pero sólo el tiempo permite comparar las vivencias personales vividas. Muchos de nosotros quizás no podamos desprendernos nunca del "sapore di sale". Para muchos no estuvo tan mal.

Notas

-Todas las crisis limpian y finalmente se tornan positivas. Aunque al principio duelan. Las crisis son siempre oportunidades de mejora porque dejan de lado lo superfluo e incentivan lo necesario.

- Avui divendres és es "cumple" de Na Joana i dilluns és es d' en Nelson. Per molts d'anys. Gràcies a tots dos per estimar-me i per aguantar-me.