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Siete años han transcurrido desde que se conoció el caso de "Ses Rates". Este diario publicó entonces el testimonio del jubilado Sebastià Marquès, propietario de un pequeño terreno junto al colegio Pere Casasnovas. Explicó cómo Llorenç Casasnovas, concejal de Urbanismo, le llevó a la notaría de Es Mercadal para vender este terreno a un amigo suyo, Antonio Picó. Después se intentó la permuta por un terreno municipal de valor muy superior. La operación se frustró en el pleno, cuando la oposición destapó las cartas y Avel·lí Casasnovas, corresponsable de Urbanismo y gestor del pacto de gobierno del PMQ, retiró la propuesta del orden del día. El lunes se cerró este caso con un pacto entre la Fiscalía y las defensas, que supone la aceptación de una condena mínima por parte de los imputados. Ese reconocimiento de culpabilidad, aunque responda a la voluntad de desaparecer de los medios de comunicación e impida analizar los hechos con detalle en una instancia judicial, deja constancia de que las sospechas sobre la forma de gestionar Urbanismo en la etapa del PP-PMQ tenían base suficiente para que sus máximos responsables hayan evitado el juicio aceptando su culpabilidad.