El otoño, esa estación teñida de color morado, nos ha traido los cambios climáticos usuales. Si bien con alternancias, el frío, las lluvias y el viento nos recuerdan que estamos en tiempo de castañas, de esclata-sangs (este año tan escasos), de tords (que enguany volen amunt), de brous bien calientes, etc. El puente de otoño es tiempo propicio para pensar sobre la actualidad. Repasémosla.
Hace unos pocos días la hemeroteca de «Es Diari» recordaba que se cumplen ya 50 años desde que el entonces notario de Mahón Don Miguel Hernández Pons (tío de mi inolvidable amigo del alma Paco Hernández Aguado) dictara una conferencia en el Ateneo de Mahón. De muy conocida familia burguesa mahonesa (de c'as ets Hernàndes) tuvo la valentía, en pleno franquismo, de defender lo que no era políticamente correcto. Aquella osadía le significó tener que abandonar la Isla y establecerse en Barcelona. La valentía de criticar puede tener su coste: en la dictadura y en la democracia. No difference.
Este otoño nos ha traído la excarcelación complaciente de criminales y asesinos convictos, un disfraz de amnistía camuflada y revestida de obligatoriedad legal que transmite desasosiego e incredulidad a la ciudadanía. Los políticos, poco previsores, como siempre han fallado al pueblo.
En cataluña, país de buena gente, se masca la tragedia. Como en todas las obras clásicas el desenlace se presiente ya desgarrador. Los sueños utópicos de algunos insensatos les acercan al precipicio. He leído lo siguiente: «Pero ¿alguien, con dos dedos de frente, se cree que Cataluña se puede independizar de España con un simple referéndum regional? ¿Están locos o son directamente lelos? Ninguna independencia se obtiene sin violencia, sin muertes, sin revolución. ¿Por qué engañan a los desinformados ciudadanos catalanes carcomidos por unos medios de comunicación infames que les han obturado su sentido de la realidad haciéndoles ver cosas que no existen?» El tema catalán acabará mal para los incitadores. Su obstinación se tornará en peligrosa frustración de buena parte de un pueblo que les ha comprado, forzado por el micro clima creado por los medios, su quimera.
Aquí en Baleares el Informe Pisa vuelve, otra vez, a quitar la razón a quienes, complacidos con su ombligo, defienden mantener el fracasado sistema educativo. ¿Para cuándo una evaluación periódica sobre la valía e idoneidad de buena parte de la clase docente balear adoctrinada en la UIB?
El gob, fundado por mi compañero de pupitre del Instituto de Mahón, el inolvidable Pedro Prats Trinidad, fue inicialmente una benemérita asociación para preservar nuestra cultura ornitológica. ¡Qué pena que, con el paso del tiempo, y con excepciones meritorias que sí merecen reconocimiento específico, haya mutado mayoritariamente en correa de transmisión de unas ideologías con intereses determinados que desvirtúan sus orígenes! Nunca debieron permitir que los políticos les pagaran su sede. Les impide ser lo que debieran. «In-de-pen-dèn-cia».
Mientras la alcaldesa de Mahón firma exclusivamente sus escritos en «barceloní» como «Alcaldesa de Maó», se olvida del programa electoral de su partido («El PP defenderá las modalidades lingüísticas propias de las islas Baleares…») y Mahó-Mahón sigue sin dedicar ningún recuerdo callejero a Richard Kane ni a los desgraciados hechos de la terrible noche del 4 de septiembre de 1535. ¿Para cuándo una reconciliación con esa parte de nuestra historia?
Nota:
-El publicista Miguel Angel Furones, brillante ponente del pasado Foro Isla del Rey y cuyo segundo libro sale a la venta el 5 de Febrero (Alfaguara) mientras ya prepara el tercero, será el conferenciante que inaugurará las Jornadas de los Jóvenes Emprendedores a principios del próximo abril 2014.
-El gran Alvite, del cual soy devoto, tiene cáncer. El Savoy está triste. ¡ Mucho ánimo!
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