TW

Siempre creí, queridos lectores, que mi colaboración en este diario terminaría por alguno de los siguientes motivos: primero, la dirección, o los propietarios, del periódico giraban en su línea de publicación y dejaban de contar con mis artículos. Dos, ustedes deciden no leer más estas líneas porque me convierto en un cansino repetitivo, está me parecía la más probable. Tres, el agotamiento me lleva a dejarlo voluntariamente, todos atravesamos esos momentos de desazón donde uno piensa que nada sirve para nada.

Lo que nunca imaginé es que pudiera existir un cuarto motivo, lo que nunca imagine era que en el siglo XXI, en Europa, en mi país, se le pudiera asestar un golpe tan fuerte a la libertad de expresión. Lo que nunca imagine es que no querían acabar con la pobreza infantil, lo que quieren es cortarle el dedo al que la señale. Lo que nunca imaginé es que no querían acabar con la corrupción, lo que quieren es cortarle la lengua al que la denuncia.. Lo que nunca imagine es que no se conforman con controlar y manipular a gran parte de los medios de comunicación, quieren silenciar a todos los críticos por moderados que sean.

Muchos se apuntan a defender la libertad de expresión después de los terribles atentados de París, y mientras salen a la calle gritando «Je suis Charlie Hebdo» para demostrar lo demócratas que son, con una mano sujetan el cartel de solidaridad con los dibujantes asesinados y con la otra aprueban leyes restrictivas y dictatoriales para silenciar a sus pueblos, y en esa danza macabra de hipocresía les acompañan sus palmeros de los medios de comunicación serviles. Lo de la separación de poderes en este país es una falacia como queda demostrado caso tras caso, pero es que además se han cargado el cuarto poder a golpes de conspiraciones y de leyes injustas.

Noticias relacionadas

Su modelo de libertad de expresión parece ser Telemadrid, líneas editoriales que van siempre en la misma dirección, mantenimiento del poder establecido y servidumbre a las grandes fortunas, al que se salga del camino marcado se le expulsa y castiga sin contemplaciones. Sin libertad de expresión la Democracia se convierte en una gigantesca mierda pinchada en un palo. La libertad de expresión es el bien supremo que diferencia a dictadores de demócratas, que diferencia la ignorancia de la cultura, que diferencia el progreso del retroceso a épocas inquisitoriales y oscuras, que diferencia al pueblo que mira al futuro de los pueblos que agonizan en silencio. Y ahora, con la terrible ley mordaza, han clavado un lapicero muy afilado en al corazón de la libertad.

Nunca tendrán las armas la razón. Nunca fue la violencia la solución. Se deben condenar todos los asesinatos, todos. La guerra es por el petróleo, por los diamantes, por el gas y los recursos naturales, por el poder y el control basados en el miedo. Que nadie lo olvide. La guerra es un ajuste entre ricos donde siempre mueren los pobres, las religiones en este punto siempre fueron una excusa, una justificación. Y actos terroristas tan crueles como la matanza de dibujantes les va de lujo a los que mueven hilos para robarnos libertad con la excusa de protegernos.

¿Cuándo tocarán nuestra puerta?, toc, toc, y oiremos el grito: «Abra a la autoridad competente, está usted ejerciendo la crítica y ese derecho fue abolido. Le puede caer cadena perpetua». Y como el miedo estará inyectado en vena, nadie moverá un dedo, o eso es lo que esperan.

conderechoareplicamenorca@gmail.com