TW

El sábado pasado estrenaron una sección en «la Sexta noche» presentado por el periodista Iñaki López y su mujer, también periodista, Andrea Ropero, quienes, por cierto, esperan un hijo. La sección es de motivación, «Enfréntate a la vida», con el exjugador de waterpolo y medallista olímpico, Pedro García Aguado, uno de los personajes que pasarán por el espacio para incentivar de alguna manera al espectador a que coja las riendas de su vida con ánimo, garbo y positivismo. Me parece una apuesta maravillosa.

Ese mismo día navegando por las redes leía algo de Mr. Puterful (el anverso de Mr Wonderful): «He aprendido tanto de mis errores que cada vez me salen mejor». (Ja, ja) Pues sí, hay que tener humor del bueno en tomarte la vida con deportividad, hay cosas que salen bien, y otras no tan bien. Y hay que seguir «girando pomos», una expresión de una amiga en su whatsapp. Genial el sinónimo de «abriendo puertas». En eso estoy, «girando pomos», con más experiencia si cabe. Si he caído, me vuelvo a levantar. Primero por mí misma, y luego porque quiero dar ejemplo a mis hijos. Cierro un negocio físico, familiar, que ellos me han visto hacer junto con mi pareja. He disfrutado en el diseño y en las colecciones de moda. Y sigo online. Y sigo luchando y haciendo equilibrios por estar con mis pequeños y en aportar economía a casa.

Noticias relacionadas

Llevo unos días escuchando el primer disco de Alejandro Sanz «Viviendo deprisa». Y eso es justamente lo que me pasa, que estoy viviendo muy deprisa las cosas. Y que de alguna manera vuelvo a ese espíritu de adolescencia, de energía. Y recordando las palabras de mi maestro Jesús Hermida, «si no tienes futuro, invéntatelo, algo se nos ocurrirá». Desde luego que no me voy a quedar a lamerme las heridas.

Hay una tacita de porcelana ilustrada por Anita Jeram, la autora del libro «Adivina cuánto te quiero», que me hace sentir muy identificada. Es una ratona con sus tres ratoncintos atendiéndoles a ellos con todo su amor, y a la vez sin dejar de trabajar y con una sonrisa. Sé que no soy la única, hay muchas mujeres y hombres haciendo lo descrito de la tacita. Sin dejar nunca de sonreír sacamos a nuestros hijos sea como sea. Son pequeños pero no por su edad les tengo al margen de la situación. Les explico como un cuento que a veces no se gana, y no por ello hay que «tirar la toalla». Y para eso es fundamental cómo te hayan educado tus padres, y la relación con tus hermanos. Porque la familia, sí o sí, es el pilar donde apoyarte. Los amigos están, pero van y vienen. Pero la familia está ahí siempre, inquebrantable. Si se han construido bien los cimientos.

@sernariadna