El rey reina, pero no gobierna

Miquel Roca Junyent, memoria viva de la Transición española, ofreció en el Cercle d'Economia de Menorca una espléndida lección de praxis política con anécdotas de hechos vividos y no narrados. Demostró sus dotes para la persuasión, a caballo entre la finezza vaticana de Giulio Andreotti y las estrategias de Maquiavelo para la supervivencia del príncipe.

Los padres vivos de la Constitución son los dos 'migueles': Herrero Rodríguez de Miñón y Roca. El abogado y político catalán, que vale más por lo que calla que por lo cuenta, evocaba la firma de los Pactos de La Moncloa, en octubre de 1997, al lado de «un Marcelino Camacho cuyo jersey aún olía a Carabanchel».

El INSULTO IMPIDE EL PACTO

Denunció Miquel Roca el griterío de las descalificaciones, la confrontación y el insulto, y reclamó propuestas de gobierno y voluntad de acuerdo para formar coaliciones. Recordó a quienes tanto critican a Trump y al trumpismo porque carece de presupuestos en Estados Unidos, que en España tampoco ha logrado Pedro Sánchez aprobar los Presupuestos del Estado de este año.

Mantuvo su tono didáctico y profesional al ser preguntado por la Monarquía. Hábil, respondió que siete países de la Unión Europea, democracia plena, funcionan con un régimen de monarquía parlamentaria consolidada. Experto en Derecho Constitucional recordó que «cuando habla el Rey es tal como le dice el Gobierno, como ocurre en Gran Bretaña con Isabel II, quien lee el discurso del Gobierno en la apertura del año parlamentario; y si no sale bien, quien falla es el Gobierno». Al aludir al poder más simbólico que decisorio del Rey, sobrevoló en el silencio atento de Sa Pedrera des Pujol la famosa frase de Adolphe Thiers: «el rey reina, pero no gobierna», axioma clásico de las monarquías parlamentarias.

Francisco Tutzó había logrado su objetivo, contar con Roca Junyent para un tertulia de lujo, en la que ambos reivindicaron el espíritu de la Transición y la validez de la Constitución. Quien fue presidente del primer Consell de Menorca destacó que la Carta de 1978 reconoció y consagró el hecho insular con la desaparición de la Diputación Provincial y la creación de los consells insulars.

El historiador y vicepresidente del Cercle, Miquel Àngel Casasnovas, trasladó a Miquel Roca una pregunta que le había formulado una alumna en el Institut Josep Mª Quadrado: «¿Por qué debo aceptar una Constitución que yo no he votado?» La respuesta valió la asistencia a este acto: «Cada país es una historia. Esta alumna tampoco votó a sus padres, ni aprobó el Código Civil, que se aplica desde hace más de cien años. Todos hablan de la reformar sin saber qué es la Constitución, un régimen para la convivencia; es la convivencia».

Esta tertulia con Roca Junyent, a la que asistió Pedro J. Bosch como oyente invitado, congregó a dos candidatos ya designados, ambos del PP, Coia Sugrañes y Antoni Juaneda; y dos candidatos posibles: Jesús Méndez, padre e hijo, de Ciudadanos, que ayer participaron en Ciutadella en una decisiva reunión sobre las elecciones del 28-A y el 26-M. En la Isla C's no celebra primarias, porque se exige un mínimo de 400 afiliados. Sobre la mesa, cinco nombres: Joan Canals, Manel Bonmatí, el concejal José Negrete, Jesús Méndez hijo, y Eudimio Carrasco. Habrá cambios.

INCOMBUSTIBLE BORRÀS

Las candidaturas del PSOE-Menorcapara el Consell y el Parlament responden a lo previsible y a lo anunciado, con el relevo, en el Consell, de María Cabrisas por su directora insular, Bàrbara Torrent, y la novedad de Josep Pastrana. Descartada la opción de Marc Pons al Congreso de los Diputados, el escogido para ocupar el tercer puesto de la candidatura del PSOE ha sido el exalcalde de Alaior Pau Morlà, mientras que la exconsellera Carme García Querol pugnará por el acta de senadora.

Marc Pons encabeza la lista al Parlament, de la que se cae Elena Baquero al incorporarse Pilar Carbonero. Ambos ya diseñan la estrategia para recuperar el control del PSOE-Menorca, que Vicenç Tur arrebató al armengoliano conseller Pons en aquel congreso de Ciutadella de cuyo resultado no me quiero acordar.

El tercer puesto ha sido adjudicado al insumergible, incombustible e imperecedero Damià Borràs, que sigue y sigue en la política menorquina, en la que empezó como secretario de Tirso Pons durante aquel lejano mandato 1983-1987 en el antedespacho de la Presidencia del Consell en la sede del Camí des Castell, asignada hoy al IME. Secretario general de la agrupación del PSOE-Maó, Borràs es un orfebre en el pícaro arte de la supervivencia política.

ENCUENTRO EN ES MIGJORN

Con Pere Moll son tres los alcaldes menorquines que se retiran de la política. El primer edil de Es Migjorn toma la misma decisión que Josep Carreres en Ferreries y Lluís Camps en Es Castell. El PSOE-Migjorn celebra hoy al mediodía un encuentro abierto para proponer ideas. «También se debatirán con los asistentes las diferentes formas que podría adoptar la candidatura para las próximas elecciones del 26 de mayo», anuncia la convocatoria.

PREGUNTAS DE LA SEMANA

¿Qué impresiones intercambiaron Joan Huguet y Antoni Juaneda en el bar OAR de Ferreries sobre la actualidad política menorquina?

¿Cuándo estará redactado el plan director del Lazareto y cuándo se abrirán al público las cuevas de Cala Blanca?

¿Cuáles son los dos partidos que formularon ofertas al alcalde de Es Migjorn, Pere Moll, para volver a presentarse?

¿Quiénes influyeron en el ex-concejal del PSOE-Ciutadella Josep Moll para concluir su aventura política en Vox?

¿Cuál es la relación de los dirigentes de Ciudadanos-Menorca con Marc Pérez Ribas, inesperado candidato al Govern?