El nuevo decreto de escolarización que ultima el conseller de Educación, Antoni Vera, prevé la reserva de plazas para los alumnos NESE, o sea, con necesidades específicas de apoyo educativo.
La formación de estos estudiantes, según recoge el texto legal, «se hará de forma equilibrada y equitativa entre los centros sostenidos total o parcialmente con fondos públicos», velando para que no superen el treinta por cien del alumnado total del centro y que no excedan en un diez por cien la media de alumnos NESE del resto de los centros situados en su zona de escolarización.
Hoy, 14 de marzo, celebramos el Día de las Altas Capacidades. Quienes forman parte de este grupo social perciben y viven el mundo de una forma distinta; sienten las emociones, aprenden y procesan el pensamiento con otros mecanismos cognitivos. Son personas vulnerables que necesitan un gran apoyo tanto de sus familias y profesores como de la sociedad que, con frecuencia, no les comprende. De ahí la pérdida de talentos, la desmotivación y el fracaso escolar cuando están llamados a ser los adalides de la excelencia.
Son incluidos en las ‘necesidades especiales de apoyo educativo’, lo que implica una identificación temprana para ser atendidos con eficacia. Pero estos loables objetivos no se cumplen por la falta de medios y recursos. Maken Massanet, autora del artículo periodístico sobre la inteligencia natural finalista del Premio Andrés Casasnovas 2024, pone el acento en un dato estremecedor: el 98 por cien de los niños y adolescentes con altas capacidades en Menorca no son detectados. Una cifra inaceptable que nos interpela y exige tantas respuestas como actuaciones.
Quien debe contestar es la Conselleria, como pide la Asociación Menorquina de Altas Capacidades (AMAC). El sábado, con motivo de la sesión con la psicóloga Rosabel Rodríguez, será el momento de exigir sensibilidad política para que la ley no sea un mero enunciado y se cumpla.
