Colas para cruzar de Rusia a Finlandia. | RONI REKOMAA

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Los pasos fronterizos para cruzar de Rusia a Finlandia han seguido registrando mucho tráfico a lo largo del fin de semana y la guardia fronteriza informó que en el de Vaalimaa, el más concurrido, la cola de coches sobre las 8 de la mañana hora local tenía una longitud de medio kilómetro. Por el sureste de la frontera, cercano a la ciudad rusa de San Petersburgo, entraron el sábado 7.662 ciudadanos rusos, un 65 % más que hace una semana, anunció la institución.

En total, llegaron a Finlandia 8.572 rusos, casi mil más que el día anterior, aunque los sábados son habitualmente el día de la semana en el que hay más movimiento, ya que muchas personas cruzan la frontera para realizar compras, como atestigua el hecho de que 4.199 rusos volvieron a salir en la misma jornada. «Fue un día ajetreado, pero no tanto como se esperaba según las cifras del viernes,» escribió en Twitter Matti Pikäniitty, responsable de la unidad internacional de la guardia fronteriza finlandesa. Aunque no existen datos oficiales que demuestren que el incremento del tráfico está relacionado con la movilización parcial anunciada el miércoles por Moscú, los medios de comunicación finlandeses han entrevistado a varios viajeros que aseguraron haber huido para no servir en el Ejército.

Por el momento, el número de solicitudes de asilo no se ha incrementado y las autoridades parten de que un porcentaje significativo de los rusos que se evaden de la movilización proseguirán su viaje hacia otros países europeos. El Gobierno en Helsinki anunció este viernes que se dispone a endurecer las restricciones para la entrada de ciudadanos rusos, que en breve ya no podrán acceder al país con un visado turístico para el espacio Schengen. Ese mismo día el número de llegadas por los pasos fronterizos del sureste, que conducen hacia la capital, registró un incremento del 88 % con respecto a la misma jornada de la semana anterior. La guardia de fronteras asegura que está preparada para aplicar a corto plazo la regulación que restringirá los visados y también para la posibilidad de que ello desencadene intentos de cruzar la frontera de forma no autorizada.