Alepo. Un grupo de desplazados por la guerra civil viven en una mezquita de la ciudad siria - Reuters

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El Gobierno del presidente sirio Bashar Al Asad está estudiando la posibilidad de hacer un alto el fuego con motivo de la festividad musulmana de Eid al Adha, como ha pedido el mediador de la ONU Lajdar Brahimi. La situación de violencia en el país sigue recrudeciéndose, ayer miércoles la explosión de un coche bomba causó seis muertos en la ciudad de Damasco.

El Ministerio de Exteriores sirio precisó ayer que el Ejército todavía está estudiando la propuesta de tregua durante la festividad del Eid al Adha (la "fiesta del Sacrificio o del cordero", la pascua musulmana) y que dará a conocer hoy jueves su decisión final.

Horas antes, el mediador de la ONU y la Liga Arabe para Siria, Lajdar Brahimi, había anunciado que el Gobierno de Bashar al Asad ha aceptado un alto el fuego durante la festividad musulmana, que comienza hoy. Según el mediador, algunos de los grupos opositores con los que ha mantenido contactos durante su visita a Siria también han aceptado en principio la tregua.

"Si esta humilde iniciativa triunfa, esperamos que podamos aprovecharla para discutir un alto el fuego más largo y efectivo y que se enmarque en un proceso político más amplio", añadió Brahimi.

Apoyo de Rusia y China

Sin embargo, el ministro se apresuró a explicar mediante un comunicado que "la propuesta para suspender las operaciones militares durante la bendita festividad del Eid al Adha todavía está siendo estudiada por la cúpula del Ejército y las Fuerzas Armadas". "La posición final sobre esta cuestión será anunciada mañana (hoy)", precisó.

A pesar de estas declaraciones, Brahimi insistió horas más tarde en que Al Asad aceptará el alto el fuego, ante los países miembro del Consejo de Seguridad de la ONU. Además embajador de Rusia ante la ONU, Vitali Churkin, admitió tras la reunión del Consejo tener "indicios" que apuntan a que en efecto el Gobierno sirio podría aceptar la tregua.

Asimismo, el embajador chino Li Baodong también respaldó el alto el fuego y los "esfuerzos" del mediador internacional para Siria.