Buenas noticias desde el sector primario de Menorca tras conocerse los últimos datos de comercialización del queso DOP Mahón-Menorca que confirman la recuperación de las ventas tras la pandemia gracias al turismo nacional. Las 2.377 toneladas vendidas en 2021 son un reflejo de esta remontada que supone un 25% de incremento respecto al año anterior, aunque no se lograsen alcanzar las cifras de 2019. Para Bosco Triay, presidente del Consejo Regulador de la Denominación de Origen, son resultados muy positivos que este 2022 se van a poder superar vista la evolución del arranque de la temporada turística. Las ventas de queso artesano Mahón-Menorca alcanzaron las 818 toneladas en un registro histórico de los últimos 30 años y el conjunto de la DOP quedó reforzado pese a los graves problemas que amenazan a las distintas explotaciones ganaderas provocados el bajo precio al que se paga la leche, el alza en los costes de producción derivados del conflicto en Ucrania y la sequía que perjudica las cosechas con las que se alimenta el ganado. El milagro de poder sobrevivir elaborando y vendiendo queso, cuya valor comercializado el año pasado fueron 15,7 millones de euros.
ARTESANO. Sin duda uno de los datos que más destacan de la recuperación son los datos históricos de venta de queso artesano, cuyo volumen comercializado aumentó un 25% respecto al año anterior aunque 2020 no se pueda considerar estadísticamente representativo a causa de una circunstancia extraordinaria como la pandemia. Pero si se comparan las ventas del año 2021 respecto a 2019 se observa un incremento de ventas del 5,4%, lo que sí constata una tendencia al alza por este tipo de queso que se elabora con leche cruda que ya viene produciéndose desde 2017, pese a que en valores absolutos no sea tan significativos. El presidente de la DOP lo atribuye al tirón del turismo nacional, su gran consumidor. «Si hace dos décadas la producción de queso artesano representaba tan solo un 22% del global, actualmente es del 41%, lo que se podríamos decir dobla su porcentaje ya que la mayoría de explotaciones han mirado de compensar el bajo coste con el que se paga la leche con la elaboración y comercialización de queso artesano», indica. Por su parte, el industrial ha crecido un 25% en producción y un 12% en comercialización.
MERCADOS. Las 49 queserías que se encargan de elaborar queso DOP Mahón-Menorca, 40 de ellas artesanas produjeron en 2021 un total de 2.966 toneladas. El 66% de la producción se vendió en Balears, el 22% fue a la Península y el 12% alcanzó el mercado internacional. El cliente que más contribuyó a la recuperación de las ventas de queso DO Mahón Menorca fue el público de Mallorca y Eivissa, donde fueron a parar el 44% de las ventas de 2021, situando a Menorca como segundo mercado con un 22%. Si lo comparamos con la tendencia de los tres últimos años, el comportamiento fue bastante similar, no así con la venta a Catalunya, el tercer mercado en importancia que ha crecido desde 2018 y lo siguió haciendo en 2021. La exportación también se reactivó con 293.694 kilos exportados. Hay que recordar que en su momento se vio afectada no solo por la pandemia sino también por la cuestión de los aranceles con Estados Unidos, uno de sus mercados más importantes. Los principales destinos internacionales fueron el cliente americano con un 44% de las ventas, Alemania con un 17% y Polonia como tercer mercado con 14.933 quilos y un 5% de la exportación. El queso Mahón-Menorca se vende actualmente en 48 países del mundo.
49 QUESERÍAS. El hecho que haya aumentado la producción artesana también se debe en parte a que en los últimos años también ha crecido el número de queserías artesanas un 30%, mientras que las ganaderías han disminuido un 11%, tres de ellas este 2021, Son Solomó, Santa Cecilia y Santa Rita. Crecen también los locales de maduración, que se han prácticamente doblado en poco más de una década. Por su parte, la producción de leche de las 104 ganaderías inscritas en el Consejo Regulador en 2021 fue de 41 millones de litros, de los cuales se destinaron 25 a la producción de queso bajo la protección de la Denominación de Origen Protegida. En la actualidad, forman parte de esta DO nueve queserías industriales y 40 queserías artesanas, de las cuales 24 están registradas como locales de maduración. Estas queserías ocupan a 270 trabajadores y las ganaderías 130 más, lo que suma un total de 400 personas trabajando en la DOP Mahón-Menorca. La isla tiene 5.905 vacas de leche registradas en la Denominación de Origen Protegida.
PREMIOS. Este 2021 el queso Mahon-Menorca ha seguido cosechando reconocimientos que se suman a su larga trayectoria. En el World Cheese Award celebrado en Oviedo, un concurso que busca los mejores quesos del mundo y en el que participan más de 4.000 productores, la DOP obtuvo diez premios repartidos entre los artesanos semicurados, artesanos curados, semicurados Mahón y Curados Mahón. Subaida se alzó con cuatro premios, una medalla de oro en la categoría de queso curado, una plata en semi y otros dos bronces en ambas secciones. Por su parte, Son Sivineta sumó otras dos platas al medallero menorquín (semicurado y curado), y otra más de la mano de Son Piris (curado). Quesos Torralba obtuvo una medalla de plata con un artesano semicurado. La Payesa consiguió también una plata con un queso semicurado y un bronce en la modalidad de madurado en cava se llevó dos premios, una medalla de plata en el semicurado y un bronce en la gama de curado. Precisamente hace unos días se entregaban también los premios del XXI Concurso de Queso Mahón-Menorca 2022 a las mejores piezas en las modalidades de curado y semicurado, tanto artesano como industrial.
PERSPECTIVAS. Todo apunta que este 2022 será un buen año para la DOP Mahón Menorca que ya se empezó a notar con el fuerte arranque de la Semana Santa. «Estamos todavía al inicio de la temporada y es pronto para hacer un balance aunque los registros de llegada de turistas son más altos y por lo tanto, nos favorece», explica su presidente Bosco Triay.
Lo que más preocupa es la fuerte subida de costes, que se ha tenido que trasladar al precio del queso y ello puede afectar a su comercialización. «Vamos a ver al final como queda», concluye.
