El grupo de corredores, al bajar del autobús en Cala en Porter y a punto de empezar. | DINO GELABERT-PETRUS

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Ataviados con uniformes chillones y elásticos pero con el mismo fervor que hay en los actos religiosos, unos 70 corredores cubrieron el viernes por la mañana los 25 kilómetros aproximadamente que separan Cala en Porter y Cala Galdana a través del Camí de Cavalls. Fue una especie de procesión deportiva en la que, una vez más, reinó el buen ambiente, las batallitas y los consejos. Los más rápidos tardaron poco más de dos horas en cubrir un trayecto en el que no faltaron tampoco senderistas y ciclistas que aprovecharon la excelente jornada para practicar algo de deporte.

Sobre las 7.30 horas los corredores asistieron a la cita organizada por Trail Menorca Camí de Cavalls en Cala Galdana, desde donde salieron un autobús grande y otro más pequeño para trasladar a los corredores hasta Cala en Porter donde empezó el entrenamiento. A la mayoría de los deportistas les sorprendió las bajas temperaturas que se registraron tan temprano y que propiciaron algunos comentarios como «¿Quién dijo que estamos en primavera?» o «No ha sido tan buena idea madrugar para salir a correr».

Otro tema muy comentado fue la broma con motivo del Dia d'enganar organizada por el diario MENORCA conjuntamente con Elitechip, ya que algunos de los participantes admitían que, en el fondo y con algunos matices, «no sería tan mala idea ¿eh? Algún animal se pasaría las 32 horas subiendo y bajando».

Ya en carrera, el pelotón se rompió rápido en varios ritmos. Los corredores disfrutaron con la salida de Cala en Porter por el barranco. Más de uno acusó algún resbalón por culpa de la humedad, sin consecuencias graves.

A su paso por Son Bou, algunos corredores bromearon con quedarse «de fiesta» mientras otros comentaban «hay poca basura por el suelo, no debe haber venido tanta gente como otros años». Las playas de Santo Tomás, Binigaus, Mitjana, Mitjaneta y, finalmente Cala Galdana regalaron estampas idílicas con mucho sol y un mar calmado que muchos inmortalizaron con las cámaras de los teléfonos.