Un momento de la subida a El Toro

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Con una tarta de cumpleaños y el tradicional reparto de premios, se despidió este domingo, la XX Volta Cicloturista Internacional a Menorca, que ha bajado el telón después de dos días intensos repletos de emociones por las sendas insulares.

Había ganas de practicar cicloturismo pero sobre todo de reencontrarse tras el paréntesis forzado del año anterior a causa de la pandemia de la covid y en este sentido, la vigésima edición ha sabido aunar ambas cosas de principio a fin. Sin sobresaltos meteorológicos como en la jornada del sábado, la matinal ha transcurrido con placidez para los 320 participantes que han tomado la salida a las 8.45 de la mañana con más de 60 kilómetros de recorrido por delante y la asignatura siempre dura de coronar los 358 metros de escalada a El Toro.

Si bien los participantes de una marcha cicloturista nunca compiten en lo deportivo, siempre hay un anhelo de superación en cada uno de ellos por la pasión que sienten por las dos ruedas y así ha sucedido también este domingo. El primero en llegar a la cima fue el mallorquín Tolo Boyeras mientras que en féminas, Mavi García se llevó el honor en una edición donde la presencia femenina ha vuelto a ser muy destacada, con 47 féminas, y consolidándola como una de las marchas cicloturistas del panorama nacional con mayor participación de mujeres.

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Mixtos

En la categoría de mejores escaladores por parejas mixtas, los ciutadellencs Tomeu Sintes y Maica Pedraza lograron el mejor crono. Tras la bajada y el reagrupamiento en Es Mercadal, el pelotón transitó con brío por carreteras secundarias y caminos de pared seca típicamente isleños como el Camí de Llucalari o el de Sa Forana, para regresar al punto de origen en el centro de Maó por el elegante Camí de Castell, que los condujo hasta la Plaça Constitució. Tras bajarse de las bicicletas y en medio de la euforia por la gesta conseguida, la música repercutió como correa de transmisión para hacer bailar a muchos de los cicloturistas, sin mostrar apenas ningún síntoma de cansancio.

«El tiempo nos ha acompañado y se nota que el pelotón ha disfrutado con el recorrido pero sobre todo por haber vivido un fin de semana de auténtico compañerismo y amistad sobre las dos ruedas», explicaba Arturo Sintes, director de la prueba, tras la Volta.