Satisfecho. Miquel Garriga está muy contento con la implicación de Pere Vadell y Joan Orfila - Archivo

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La condena del regreso a la Regional ya se ha instalado en Ses Arenes. El 0-3 del domingo ante el Peña Deportiva certificó el descenso del Norteño, que cierra una etapa histórica para una localidad con 200 vecinos. Pero desde el primer momento, Miquel Garriga, presidente del club, apuesta por recuperarse y volver a Tercera cuanto antes. Para ello cree que la opción ideal es Pere Vadell, el actual técnico, al que espera ofrecerle que siga en el cargo el próximo curso.

"Conozco a Pere y sé que no suele quedarse mucho tiempo en un equipo, pero nuestra intención es que siga así que la decisión dependerá más de él que de nosotros", explica Garriga, que ha confiado en el de Es Mercadal desde el primer momento. El presidente apunta que "le falte el título para entrenar en Tercera podría ser un problema a largo plazo pero se puede resolver".

El Norteño todavía podrá presumir de su condición en Tercera los próximos cuatro partidos, con dos derbis en casa ante el Alaior y el Mercadal. "No vamos a cortar jugadores para ahorrarnos ningún gasto porque estamos muy contentos con la actitud de todos y seguro que más de uno nos ofrecería jugar sin cobrar", matiza Garriga, que está orgulloso "de los jugadores y del cuerpo técnico porque lo han dado todo, se han vaciado sobre el campo".

Sobre la histórica primera campaña del Norteño entre los mejores del archipiélago, Garriga la resume: "Somos un equipo humilde, el ascenso fue histórico y tras una travesía muy larga, hemos llegado pero al puerto que no tocaba". Además, el presidente reconoce "haber visto muy buen nivel y nos ha pesado no contar con más recursos y la primera vuelta en la que sólo hicimos 7 puntos".

Garriga, satisfecho por el derroche de su equipo, admite que "por un lado estoy decepcionado por la poca colaboración que nos hemos encontrado pero es lo que hay en Fornells, somos pocos vecinos; la llegada de los tres nuevos jugadores gracias al despacho de abogados nos dio algo de esperanza", pero fue insuficiente.