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El CE Mercadal sigue sin conseguir estrenar su casillero de triunfos y este domingo de nuevo ante el Son Cladera ( 1-2), un rival directo, sucumbieron en casa. Los hombres de Pere Vadell, que debutó de forma oficial en el banquillo rojiblanco de local, vieron como los mallorquines volteaban el electrónico en la segunda parte y se quedan como colistas de la clasificación.

La primera parte del cuadro local fue aceptable pero en la segunda estuvieron a remolque de los hombres de Isidro Marín. De nuevo, la falta de contundencia defensiva quedó de manifiesto y con una alarmante fragilidad mental cuando se tuerce el partido. Tiene trabajo Vadell para tratar de revertir una situación que cada vez es más delicada. Ayer arrancó bien el Mercadal el choque y no tardó en encontrar su recompensa. Una jugada iniciada por Rubén, cedió el esférico a Migue, que asistió a Guiem, que anotó el 1-0. Llegaron los mejores momentos sobre el rectángulo de juego de los locales y con ocasiones claras para haber liquidado el partido. Guiem superó al portero Xavi, se quedó casi sin ángulo y su disparo fue salvado por la zaga visitante. Carlos también tuvo cerca el segundo; el delantero no supo definir ante Xavi. En el minuto 38 llegó la primera polémica. Clara falta de Collin al derribar a Rubén, cuando entraba en el área rival. El colegiado le perdonó la segunda tarjeta amarilla. Tres minutos más tarde, otra jugada que pudo marcar el devenir del partido. Un pase de Robert, habilitó a Guiem y el árbitro asistente señaló fuera de juego, cuando la posición del delantero era totalmente legal. Se llegó con el 1-0 al descanso.

Cambió por completo la cara del Mercadal en la segunda parte. A los cuatro minutos de la reanudación llegó el empate del Son Cladera. Matas se aprovechó de un balón muerto en el interior del área para superar a Aaron (1-1). A partir de aquí, los hombres de Vadell desaparecieron del partido y los chicos de Marín se hicieron con la manija del encuentro. Rubén lo intentó en una buena jugada pero el meta despejó a esquina. En el lanzamiento de córner, tras varios rebotes, Migue remató y el meta de nuevo salvó. Aquí prácticamente se acabaron las jugadas con peligro de la escuadra que dirige Pere Vadell. Lo intentaban eso sí pero sin crear dudas a la defensa mallorquina, que estuvo muy bien, principalmente sus dos centrales Pau y Guijarro.

En el minuto 73 llegó el mazazo final en Sant Martí. Una pérdida local en la medular fue finalizada por Pablo, anotando el 1-2. Se fue arriba el Mercadal con más corazón que ideas y estuvo más cerca el tercero de los visitantes que el empate rojiblanco. La más clara, para Raúl, que disparó alto con todo a su favor. Nueva decepción en Es Mercadal a la finalización del partido.