Olmos. El técnico está convencido de que ha llegado el momento de ganar fuera del Pavelló Menorca - Archivo

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Presente inmediato. Ni pretérito pluscuamperfecto. Ni futuro imperfecto. El tiempo verbal favorito para Paco Olmos es el presente inmediato. Entiéndase como el partido que mañana, a partir de las 21 horas, disputa ante el Kics de Vigo, una cita un tanto atípica ya que el equipo gallego ha esperado hasta estar descendido para ganar lejos de su casa y lo hizo justamente la semana previa al partido contra el ViveMenorca. "Queremos ganar en Vigo y no vamos a mirar más allá porque creo que en las últimas tres jornadas habrá un baile de equipos", dijo Olmos, que todavía no piensa en la tercera plaza sino en asegurar la cuarta mientras cumple con un ansiado objetivo indispensable de cara al play off. Ese insignificante detalle que aguarda a tres partidos vista.

El ViveMenorca "siente que es el momento de ganar fuera. Tenemos claro que hemos hecho una segunda vuelta bastante mala lejos de casa, donde empezamos compitiendo pero en los últimos partidos hemos dejado de competir" el motivo por el que los jugadores, según el técnico valenciano, deben salir "agresivos". Enfrente esperará el Ciudad de Vigo un rival "al que le debemos el máximo respeto, ha hecho una liga donde ha salido a competir en todos los partidos, ganó, a pesar de estar descendido, la semana pasada en Málaga". Una alegría efímera y pasajera para una afición que se espera que mañana no acuda en masa al polideportivo As Travesas.

Para Olmos el objetivo es "evitar esta imagen doctor Jekyll y míster Hyde... En casa hemos recuperado la solidez importante, hemos sufrido y hemos ganado con un buen baloncesto y eso tenemos que transmitirlo en los partidos lejos de casa" y para ello "tenemos que priorizar nuestros inicios de partido, donde creo que nos hemos ido en los últimos partidos".

El principal problema para Paco Olmos son los lesionados y dudas. El parte de guerra tras el partido ante el Burgos fue peor de lo previsto. Umeh tiene una fractura en los huesos propios de la nariz que le obliga a jugar con máscara. Guzmán acabó con problemas físicos. Diego Ciorciari no está al máximo porque forzó en exceso el pasado sábado. Pero Olmos recupera a Urko Otegi, pura garra y compromiso, lo que es una garantía.

Puede que sea, de nuevo la hora de Iván Llull, en quien Paco confía y en el que "tras dos actuaciones correctas ante Mallorca y Burgos" espera tenga "un punto de confianza para saber que no tiene que cometer errores".

A la hora de explicar al Vigo, el ex del Melilla admite que "Vigo juega sin presión pero sus jugadores tienen en la mente que querrán jugar en LEB Oro la temporada que viene y por eso tienen que hacer un buen final de temporada" y que "nos encontraremos en un ambiente muy frío, con poca gente, pero debemos concentrarnos en nosotros, en hacer lo que sabemos que tenemos que hacer pero que no hacemos y pensar que es un partido muy importante porque ganar fuera de casa es de los detalles que necesitamos para creernos competitivos en el momento final".

Pero si por algo destaca Olmos es por la sencillez de sus explicaciones. "Nos falta ganar fuera de casa, no tiene más explicación". Pues lo dicho. Ánimos.