Jesús Muñoz. El zaguero del Norteño, en acción, fue el autor del primer empate para su equipo - T.T.

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Derrota (3-2), pero con un sonrisa, la que se llevó el Norteño en su visita al municipal de 'Ses Eres' ayer tarde. En un partido de ambiente caliente y ante un rival especialmente inspirado en sus remates, el once de Pere Vadell consiguió permanecer enchufado a esta eliminatoria.

Pese a la derrota, las opciones de pasar esta ronda permanecen intactas, gracias entre otras cosas a la fe mostrada en todo momento por parte del equipo azulón.Y eso que el arranque de partido no fue precisamente bueno para los intereses del Norteño. El Serverense, acompañado de un público chillón y 'caliente' de salida, se vio encajonado en su propio medio campo ante la presión inicial de los rojillos. Fruto de ello vino al cuarto de hora de partido una excelente acción por banda derecha del central mallorquín Óscar, que con calidad y fuerza llevó el esférico hasta el corazón del área menorquina, fusilando en su salida a Barceló. El gol hacía, en cierta medida, justicia al dominio y presión que hasta el momento ejercía sobre un adormilado Norteño. Lejos de hundirse, los de Pere Vadell supieron levantarse del primer guantazo y empezaron a hacer lo que mejor saben hacer: jugar y luchar, que en estas eliminatorias a doble partido, el juego de salón queda para las 'playstation'. De esta guisa, el conjunto azulón fue poco a poco comiéndole el terreno a un Serverense que se fue deshinchando con el paso de los minutos, hasta que llegó el empate. La estrategia funcionó muy bien esta ocasión con el testarazo de Jesús Muñoz, que entró con todo dentro del área del Serverense llevándose por delante al balón y al guardameta local quien en su salida impactó con el rocoso defensa menorquín.

Con tablas en el marcador, a punto estuvo de irse al traste el positivo resultado cuando una acción brillante en la frontal del área de Pablo no acabó en gol por la feliz intervención de un Barceló que tuvo que emplearse a fondo ante el remate del número 11 local.

Y si en el primer tiempo, el Norteño se vio sorprendido por la salida en tromba de los locales, en el segundo sucedió más de lo mismo. Minuto cinco de la reanudación: Fran, desde unos cuarenta metros de distancia, de tremendo zapatazo sorprende a todos colocando todo un golazo ante el cual Barceló nada pudo hacer.

El Norteño, al igual que en el primer periodo, buscó de nuevo la igualada, pero el remate de José tras saque de esquina botado por Llor se estrelló en la madera del marco local. Y de lo que pudo ser el 2-2 se pasó al 3-1. Y de nuevo, golazo para enmarcar. Pablo lo probó desde muy lejos y le salió bien. Así de simple y de complicado a la vez.

Con el 3-1 y ya con Óscar y Roca en el campo, se pasó a un fútbol mas directo, buscando el gol a partir de la estrategia, y sobretodo de la velocidad. Óscar lo tuvo en sus botas nada más salir al campo, pero su remate, forzado y con poco ángulo, se encontró con la colocación del cancerbero local.

Los minutos pasaban y la situación no variaba ni un ápice, con un Serverense esperando a la contra poder aumentar la diferencia en el marcador frente a un Norteño al que el 3-1 le picaba, y mucho. Y el que se llevó el gato al agua fue el conjunto de Pere Vadell. En esta ocasión Óscar, en idéntica situación a la que anteriormente disfrutó, sí que acertó con su remate, colocando un 3-2 esperanzador para un Norteño que, pese a la derrota, nunca perdió la cara al partido.