TW
1

Toni Catchot, presidente, y la directiva de la Sociedad Hípica Amigos del Noble Bruto, tratan de rebajar la tensión que marca la actualidad en el recinto mahonés a raíz de los últimos acontecimientos, en concreto la dimisión del anterior presidente, Josep Gardés, como consecuencia de su agresión al socio, Santi Escudero, y las polémicas declaraciones vertidas por éste en «Es Diari» la pasada semana en las que criticaba la gestión de la junta y deslizaba sospechas sobre prácticas fraudulentas con las monturas por parte del anterior mandatario y miembros de la junta.

Siempre amparado en un discurso moderado y conciliador, Catchot sostiene que «Escudero puede opinar sobre lo que quiera y ser crítico pero hablar de dopaje sin pruebas hace daño porque la comunidad del hipódromo es muy sensible y distorsiona su imagen». Catchot, que acaba de iniciar su segundo mandato al frente de la SHANB, añade que «en cuestión de dopaje hay que ser muy estrictos, por eso todos se sienten dolidos y ofendidos».

El presidente defiende la limpieza del hipódromo al indicar que «puedo asegurar que la mayoría no incurre en ninguna práctica fraudulenta, ahora bien, si hay algún espabilado que se salta las normas, puede haberlo pero yo no lo sé».

El control antidoping  de los equinos no se realiza de una forma periódica dada la falta de medios, como sería lo más aconsejable, admite Catchot. «Un par de veces al año pedimos ese control a la Federación Balear que nombra a un veterinario de aquí para que lo haga. Lo ideal sería que se hicieran más controles y que fueran aleatorios durante el año, pero como presidente puedo decir que la Federación está haciendo lo posible para detectar cualquier fraude».

Mejor premio, más entreno
Escudero aludía a la mejora de los cronos de los caballos cuando hay premios en metálico más elevados, Catchot indica que «yo lo atribuyo al trabajo que hacen los entrenadores cuando viene una carrera importante. Es como en cualquier otro deporte en el que la punta de preparación se hace para las grandes citas».

El presidente admite que aficionados o socios puedan mostrarse críticos con decisiones adoptadas por la junta, como lo que afecta a la presentación de la programación anual de las carreras, que ahora volverá a hacerse en el primer trimestre o con quienes discrepan sobre la tardía presentación de los balances económicos de 2012 o 2013 que hizo la anterior junta.

En relación al uso de tres establos del hipódromo por parte del socio Santi Escudero, Catchot explica que «éticamente no lo ha hecho bien porque los tiene sin tener caballos que compitan aunque pague el alquiler. Ahora hay establos suficientes porque debido a la crisis no hay tanta demanda, pero lo normal sería que sí la hubiera».