El tándem Pau Hierro y Alberto Llera, quedó tercero en la categoría sub-23 | Jonas Pravia

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El descenso del Sella es una de las citas veraniegas imprescindibles para los amantes del piragüismo y la canoa. La edición de 2019 ha sido la más numerosa de los últimos años, con 1.157 participantes y 808 embarcaciones provenientes de 16 países.

De entre estos más de mil participantes, cinco procedían de Menorca para tomar parte en la edición 83 del descenso internacional del río. De todos ellos, destaca la actuación del piragüista del Club Marítimo Mahón, Pau Hierro, que consiguió subir al podio en tan importante cita.

Hierro consiguió el bronce en K2-sub 23 haciendo tándem con Alberto Llera. Además, la pareja mixta del Marítimo, Inés Ramo y Julián Serrano, acabaron 13º de 45 participantes en K2 mixto. Por parte del Club Nàutic Ciutadella, Toni Moll y Biel Caldentey repitieron la experiencia del año pasado, pero sin la fortuna de su parte. Moll sufrió el choque de lleno de otra embarcación, que le provocó un gran agujero en la piragua y le obligó a abandonar. «Mala suerte en un Sella que tiene estas cosas», decía Moll que, a pesar de todo, estaba contento con esta nueva aventura vivida con centenares de contrincantes.