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Los dos pescadores furtivos que fueron arrestados a principios de junio al ser sorprendidos por una patrulla del SEPRONA realizando pesca submarina en la Reserva Marina del Norte de Menorca se enfrentan a una sanción de 30.000 euros para cada uno.

El Servicio de Protección de la Naturaleza ya ha presentado el expediente sancionador contra los furtivos detenidos por una infracción administrativa fijando la multa en 30.000 euros.

No obstante, quien dictaminará la cuantía final a aportar por cada uno de los acusados por dicha actividad ilícita depende de la Conselleria de Economía y Agricultura, que está tramitando el expediente.

Cabe recordar que la patrulla del SEPRONA sorprendió a los acusados en la noche del 7 de junio mientras se encontraban realizando pesca submarina en la Reserva Marina del Norte de Menorca.

Los agentes les intervinieron cinco meros y una corvina de un peso total de 35 kilogramos y 23 cigalas menorquinas. Los supuestos autores fueron puestos a disposición del Juzgado de Instancia e Instrucción número 1 de Ciutadella al haber capturado especies protegidas y otras que se encuentran en veda en un espacio de especial protección.

La Benemérita sospechó en su momento que el destino final de la captura era el mercado clandestino, donde la mercancía hubiera alcanzado un precio aproximado de 2.000 euros.

Cabe recodar que una de las personas detenidas es un efectivo de la Policía Local de Alaior.