Rubén P. AtienzaCiutadella02/10/12 0:00
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Visto ayer mismo en una red social. Una persona publica la imagen de un libro de gramática y dice que está buscando una pañalera. Quizás no obtenga lo que desea, pero es muy posible que finalmente se haga con algo que sea de su interés y que le ofrezca alguna de las 1.165 personas que forman parte del grupo Facebook "Menorca Trueque". Y es que parece que con esto de la crisis, la gente recurre a costumbres de antaño, cuando el intercambio sin moneda de por medio estaba a la orden del día.

Explica en la página web la administradora del grupo, Noelia Solá, que "en los tiempos que corren, más que nunca hay que hacer uso del ingenio y no del consumismo para salir reforzados de verdad". Y parece que la iniciativa está funcionado bien, a tenor de los resultados que se están obteniendo desde que la página se estrenara hace casi nueve meses.

Todo empezó cuando a través de una amiga descubrió un grupo de este tipo que funcionaba en Barcelona. "En aquel entonces yo estaba embarazada y necesitaba cosas que con los tiempos que corren me era difícil comprar. Entonces pensé que mucha gente estaría igual. Creí que podría funcionar al ser Menorca un lugar en el que resulta fácil ponerse en contacto. Pensé que estaba al alcance de todo el mundo y podría ser muy beneficioso para mucha gente", relata Solá.

Como todo grupo, este también tiene sus normas, y entre ellas hay una fundamental: "Se borrará todo mensaje que hable de vender o comprar y de dinero, pues para eso ya hay muchísimos lugares. Aquí se intercambian conocimientos y material", se alerta a los interesados en participar. "A pesar de que existen unas bases claras, siempre hay alguien que se olvida de dejar el dinero de un lado. La pillería de ofrecer algo gratis al final tenía 'gato encerrado' en algunas ocasiones, pero muy pocas", explica Solá, quien añade que también hay gente que simplemente regala las cosas.

Variedad

La realidad es que en "Menorca Trueque" se puede encontrar una gran variedad de artículos. Desde ropa para bebés, hasta una lancha neumática, pasando por una guitarra eléctrica, una lavadora o un puzzle.

¿Lo más extraño que se ha ofrecido en el grupo? Cuenta la administradora que probablemente "un cráneo de dragón para decoración, unos cuernos de toro o un monociclo", por citar solo algunos ejemplos de la variedad que ofrece el grupo de intercambio. "Casi cualquier cosa que necesites la puedes encontrar. Y si no está, la pides y casi siempre hay respuesta de alguien que la tiene", señala Solá, quien concluye que es una iniciativa que "ha sorprendido por su sencillez y por la gran ayuda que puede llegar a ser. Yo pienso que tiene un gran futuro".