Mercè Morató. Esta dentista es fundadora de la ONG Odontología Solidaria - Gemma Andreu

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Un control exhaustivo de la ingesta de gominolas, un buen cepillado y el flúor. Éstos son los tres pilares básicos para que la sonrisa de un niño esté sana. En estos momentos en que la situación económica de muchos hogares menorquines se ha visto resentida, la sanidad bucodental y la economía no necesitan ir de la mano.

Así lo considera la dentista Mercè Morató quien apunta al Programa de Atención Dental Infantil, gratuito y cuyo objetivo principal es la prevención.

No obstante, Morató señala que aunque la Comunidad Autónoma mantiene el programa con una partida económica, el IB-Salut no ha remitido últimamente la carta que solía enviar a los padres de los niños que se incorporaban a este proyecto, por lo que "hay máximo desconocimiento sobre la existencia de esta buena iniciativa". Además de Mercè Morató hay seis dentistas más de la Isla inscritos en el programa bucodental así como tres centros de salud, tal y como se puede consultar en la página web del IB-Salut. Este año, pueden beneficiarse de esta atención dental infantil todos los niños con edades comprendidas entre los 6 y los 14 años. El proyecto, que en Balears lleva funcionando siete años, incluye una revisión anual y los consejos preventivos así como los tratamientos necesarios en la dentición permanente, ya sea sellado de fisuras, obturación de caries, endodoncias, tratamientos bucales de urgencia o corrección de traumatismos de los incisivos y de los caninos, entre otros servicios. Morató asegura que el programa "está muy bien planteado" por lo que sería "una pena" que en algún momento llegara a desaparecer. Además, considera que en estos momentos en que la gente opta por los seguros médicos, se debe conocer la existencia de este programa al que pueden acceder los niños y evitar por tanto un gasto añadido.

Esta dentista asegura que los problemas dentales se pueden detectar y prevenir fácilmente con un par de visitas al año "siempre y cuando los niños acudan en el momento en que los primeros dientes definitivos (de los seis años) aparecen y durante toda la etapa de recambio y entrada de la adolescencia". También señala que el máximo objetivo es lograr que un niño no llegue a tener una caries, a partir de la prevención y el cuidado.

Morató atendió el año pasado a unos 40 niños a través del programa de atención bucodental. Este año, "aun no ha habido movimiento respecto a los niños que pueden empezar a formar parte del programa", señala. Además, reitera que el abono que hace el Govern por cada niño tratado es "simbólico", por lo que "el estímulo del dentista en este programa no es para nada económico".

Por otra parte, señala no ser partidaria de "los empastes en caries de leche". Para esta dentista fundadora de la ONG Odontología Solidaria, hay un cariostático llamado fluoruro diamínico de plata que "aunque deja la caries negra conseguimos que el niño no tema al dentista ni a la anestesia". Reconoce que es algo revolucionario y que el producto no se utiliza en España sino más bien en países como América del Sur, Japón y Australia.