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Actualmente tan sólo el 2,9 por ciento de la energía que se produce en Menorca se genera con sistemas alternativos, y únicamente el 1 por ciento de lo que se consume se ha producido a través de fuentes renovables. Eso significa que la Isla continua con una dependencia externa en casi su totalidad.

Las energías renovables tienen, hoy en día, una presencia muy testimonial en la Isla, a pesar de ser un lugar que, por sus reducidas dimensiones, es muy adecuado para su implantación. De hecho, la energía que se produce a través de estas fuentes no llega al 3 por ciento del total. El parque eólico de Milà genera el 1,3 por ciento y las instalaciones fotovoltaicas de Son Salomó y Binisafúller suman otro 1,6 por ciento.

Algo muy pobre, según apunta el responsable del recinto de aerogeneradores y técnico del Consorci de Residus Urbans i Energia de Menorca, Rafael Muñoz. Para él, "la situación de la Isla es muy decepcionante, porque a pesar de los intentos de particulares y empresas por sacar adelante algunos proyectos, la tramitación y la autorización de estos son demasiado lentas, lo que hace que los inversores acaben abandonando la idea".

Normativa dificultosa

La normativa actual en relación a las energías renovables y al sistema eléctrico español "es un galimatías, cada día hay cambios en procedimientos, en normativa, hay un real decreto casi cada mes. Y con eso se hace muy difícil poner en marcha proyectos", afirma Muñoz.

A esto se añade, además, la falta de una percepción clara por parte de la sociedad entorno a la necesidad y la conveniencia de apostar por las renovables, lo cual acaba reiterando la dependencia tan elevada existente hoy en día de los combustibles fósiles, que llega a ser del 99 por ciento. Esto hace que cada año los menorquines destinen "240 millones de euros en petróleo, gas y otros combustibles" de este tipo.

Así, queda patente el reto de Menorca en relación a las energías alternativas. Aún más teniendo en cuenta la consideración de Reserva de la Biosfera que tiene la Isla.

Hay potencial

En lo que no hay duda es en el potencial que tiene Menorca a la hora de impulsar la implantación de las energías renovables. "Lo hay e incluso sobra para cubrir las necesidades" del territorio insular. Pero "se necesita voluntad social, capacidad económica y el impulso político". En este sentido, el responsable del parque de Milà considera que "empieza a surgir la conciencia de que es necesario llevar a cabo un cambio energético, pero debe explicarse a la gente cual es la realidad, dar información y facilitarselo a los particulares para que puedan invertir en renovables".

En cualquier caso, los expertos en esta materia son conscientes de que el paso de la electricidad tradicional y de los combustibles fósiles a los sistemas alternativos no puede hacerse de una forma inmediata, sino que es necesario trabajar a 20 o 30 años vista, marcando las líneas del cambio en el modelo energético, y permitiendo las inversiones tanto privadas como públicas.

De este modo, se podría ir incrementando paulatinamente la presencia de las energías renovables, lo cual iría también en la línea de cumplir los objetivos que la Unión Europea ha fijado para 2020, y que son la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero un 20 o un 30 por ciento en relación a los niveles de 1990; incrementar un 20 por ciento la presencia de las energías renovables; y aumentar un 20 por ciento la eficiencia energética.

En cuanto a las energías renovables más válidas para Menorca, Rafael Muñoz destaca las "técnicamente más maduras", que son la eólica terrestre, la fotovoltaica y algunas ligadas a la biomasa. Igualmente, el técnico considera que también se podrían introducir en la Isla otras como la electrotermosolar, la undimotriz (generada por el movimiento de las olas) y la eólica marina, que "es donde Menorca realmente tiene más potencial". No obstante, esta posibilidad se contemplaría como una alternativa a 20 años vista.

Sea como fuere, los expertos tienen claro que "si en El Hierro pueden ser cien por cien renovables, aquí también podemos, si no en su totalidad, si en un porcentaje importante".

No solo autosuficiencia

La secretaria autonómica de Promoción Empresarial y Ocupación, Lourdes Cardona, destacó durante la inauguración del Congreso que Menorca es la Isla del Archipiélago pionera en implantación de energías renovables. "Cuenta con el primer proyecto de parque fotovoltaico de las Islas, Son Salomó, que opera directamente a precio de mercado sin subvenciones, y también el primer y único parque eólico, Milà".

Sobre ellos, Cardona indicó que "el funcionamiento de ambos parques ha demostrado que la protección del territorio, el mantenimiento de la actividad agraria, turística, el respeto al medio ambiente y la autosuficiencia energética van de la mano de las energías limpias". Por eso, el Govern quiere aprovechar el sol y el viento para generar un nuevo "yacimiento empresarial, de empleo y, sobre todo, de autosuficiencia energética", explicó.