Operativo. Los tripulantes fueron rescatados y las embarcaciones remolcadas por la mañana - Javier

TW
0

La tramontana dio más de un susto ayer, cuando de madrugada hizo acto de presencia, con rachas que llegaron a los 62 kilómetros por hora, y que ocasionaron problemas a algunas embarcaciones. En Fornells, un catamarán, un velero y otras dos embarcaciones se vieron arrastradas hasta la orilla, provocando incluso roturas en el casco de uno de ellos.

El Centro Meteorológico de Balears informó que a las tres de la madrugada se habían registrado rachas de 62 kilómetros por hora en Es Mercadal, y de 59 kilómetros por hora en el aeropuerto.

La entrada de estos vientos del norte afectó a varias embarcaciones que estaban fondeadas en la bahía de Fornells, y que aunque habían sido alertadas de la llegada del mal tiempo, no tomaron suficientes medidas para evitar incidencias. Fue así como el ancla del catamarán El Pato no pudo resistir los embistes, y la embarcación fue arrastrada hacia Cabra Salada, una calita situada al otro lado de la bahía, donde la menor profundidad de la zona hizo que el barco tocara fondo, y se abrieran hasta tres vías de agua por estribor, por el impacto contra las rocas.

Los ocupantes del catamarán, un matrimonio francés y sus tres hijos, no sufrieron daños personales, y pudieron ser rescatados por personal de Ports de les Illes. Ya por la mañana, una embarcación de Pedro's Boat Center lo remolcó hasta el varadero, donde una enorme grúa de la empresa Bernardo Pons sacó el catamarán del agua.

Antes, mientras el catamarán se encontraba embarrancado, un velero con una mujer a bordo también fue arrastrado hasta el mismo lugar que el catamarán, al igual que otras dos embarcaciones. En estos casos no hubo daños materiales, y solo se tuvo que remolcarlas unos metros hasta poder arrancar sus motores.

Cuatro agentes de la Guardia Civil del cuartel de Es Mercadal participaron en un operativo que levantó mucha expectación en Fornells. Los hechos, que la Dirección Insular de la Administración del Estado confirmó que no ocasionaron daños personales, sí que generaron nerviosismo entre los afectados.