Ataviados con sus camisetas verdes reivindicativas, maestros y profesores volvieron ayer a salir a la calle - Javier Coll

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El día que parecía señalado para apagar o mitigar el incendio declarado en la educación balear acabó con un nuevo chorro de gasolina sobre las llamas. Yes que no solo la sexta reunión entre Govern y agrupaciones convocantes acabó sin acuerdo, sino que además el jefe de los inspectores, Antonio González, presentó su dimisión. La razón habría sido, según algunas fuentes, no haber querido atender la orden de la Conselleria de Educación de solicitar listas con los alumnos que no están acudiendo estos días a clase.

El secretario autonómico de Educación, Guillem Estarellas, aseguró a mediodía que González continuaba en el cargo, pese a que horas después se hizo pública una carta con fecha de ayer mismo en la que el inspector anunciaba la dimisión a sus compañeros. Estarellas admitió la existencia de discrepancias entre ambos, pero puntualizó que se habían solventado por lo que «en este momento está en su sitio, en el departamento», lo que da a entender que González se habría retractado de sus intención inicial.

Sobre las listas de estudiantes que no acuden a clase, Estarellas negó órdenes específicas en este sentido y declaró que Inspección tiene que asegurarse de que los tutores controlan las ausencias. El procedimiento habitual es que si un alumno falta quince días el centro se pone en contacto con sus padres para saber el motivo.

Las reacciones no se hicieron esperar. Desde CCOO, Toni Baos señaló que esta situación es «una señal más del desastre que tenemos en la Conselleria de Educación» mientras que desde Més per Menorca, el diputado Nel Martí comentó que «elaborar listas de niños es traspasar una línea roja que en democracia nadie ha traspasado», Los nacionalistas han anunciado que llevarán esta orden, de la que han reclamado confirmación, a la Fiscalía.

En cuanto a la reunión de ayer entre Govern y organizaciones que impulsan la huelga, volvió a acabar sin acuerdo. STEI, CCOO yAssemblea de Docentes plantearon la voluntariedad del TILen todas las etapas, algo a lo que la Conselleria se opone. Los sindicatos criticaron el inmovilismo del Govern, y por contra desde el Ejecutivo balear lamentaron que los convocantes de la huelga abandonaran la negociación. La consellera Joana Maria Camps aseguró que ya se han hecho muchas concesiones en asuntos paralelos al TIL, pero reclamó que se abandone «la palabra voluntariedad y se pase a hablar de implantación». Las reuniones se deben retomar hoy a partir de las 11 horas.

En las asambleas de docentes, celebradas ayer en Menorca y el resto de las islas, se determinaron los mínimos que debe cumplir cualquier acuerdo. Si no se alcanzan, hoy volverán a reunirse para decidir las acciones a realizar.