Joana Gomila, con Marta Marquès, en pleno

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El Ayuntamiento de Ciutadella ha abierto, al menos, tres expedientes a una fábrica clandestina de bisutería, a la que se atribuyen en parte los vertidos residuales que se vienen registrando estos últimos meses en la zona verde del Canal Salat.

Este último hecho ha motivado la apertura de uno de los expedientes. Los otros dos se le incoan por desempeñar una actividad sin permiso y, a nivel urbanístico, por las obras realizadas sin licencia. Además, este viernes se añadio una denuncia vecinal en su contra que será incorporada al expediente.

El Consistorio ya ha empezado a notificar los incumplimientos al presunto infractor, a quien ha requerido también para que cese de inmediato su actividad. La concejal de Gobernación, Marta Marquès, anunció este viernes que este es, precisamente, uno de los objetivos de la administración: lograr el cese de la actividad clandestina que se viene llevando a cabo e imponer al autor una sanción económica.


Esmeralda

Por otra parte, el Ayuntamiento ultima la resolución final del expediente incoado por la explotación sin permiso durante el pasado verano del bloque residencial erigido sobre el antiguo Esmeralda como aparthotel. La empresa que gestionó el alojamiento no ha pagado ninguna de las cuantías reclamadas a modo de sanción: ni los 400.000 euros por abrir sin la licencia turística del Consell ni los 400.000 más en concepto de IBI.